ROMA, martes, 18 enero 2005 (ZENIT.org).- Hacer oír su voz ante los gobiernos para que respeten los compromisos internacionales, ante todo la reducción de la pobreza a la mitad para el año 2015, es la finalidad de la Campaña sobre los Objetivos de Desarrollo del Milenio que promueve «Caritas» italiana y Voluntarios del mundo-FOCSIV.
Roma fue el lunes escenario de la presentación de esta iniciativa, que supone un «momento de gran movilización de varias realidades del mundo católico para reafirmar un compromiso unitario en la promoción y en la defensa de la dignidad de todo ser humano», explica un comunicado de «Caritas» italiana.
Según el organismo católico de ayuda, «la trágica emergencia provocada por el tsunami ha puesto los focos de todo el mundo en las carencias estructurales y la vulnerabilidad de poblaciones que son víctimas comunes de pobreza e injusticia».
Pero «una catástrofe aún más trágica golpea diariamente el sur del mundo –denuncia–: más mil millones de seres humanos viven en condiciones de miseria».
Ante estas cifras alerta de que «la generosidad humanitaria episódica no es suficiente», sino que «hay que adoptar soluciones a largo plazo que impliquen un compromiso más consistente por parte de la comunidad internacional y un nuevo impulso a la ayuda pública al desarrollo».
«A la luz de cuanto ha ocurrido en el sudeste asiático, la sociedad civil, organismos y asociaciones están llamadas a movilizarse –exhorta– para recalcar a los Estados la necesidad de la consecución de esos objetivos considerados prioritarios en la lucha contra la pobreza».
Y ello con vistas a «tres importantes citas» de este año: el G8 previsto en Escocia en julio, en septiembre la LX sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre el Estado de la realización de los Objetivos y la Conferencia Interministerial de la Organización Mundial del Comercio prevista en diciembre en Hong Kong.
De acuerdo con «Caritas» italiana, hoy más que nunca se ve «claro que el verdadero instrumento para construir paz, seguridad y desarrollo, es una adecuada política de cooperación y solidaridad que permita garantizar derechos y oportunidades iguales para quienes viven en condiciones de pobreza y miseria».
La campaña se promueve en colaboración con ACLI, Acción Católica, CISL, CVX, MCL, la Comunidad Papa Juan XXIII y el Movimiento de Jóvenes Salesianos.
Reducir a la mitad la pobreza en el mundo costará 135 mil millones de dólares anuales, cantidad que irá creciendo hasta alcanzar los casi 200 mil millones en el año 2015, estima la ONU en el informe «Invirtiendo en el desarrollo: Un plan práctico para conseguir los Objetivos de Desarrollo del Milenio» –el informe del Proyecto del Milenio– que presentó el lunes el secretario general del organismo, Kofi Annan.
Según un comunicado de prensa de la ONU, el documento, que ha tardado tres años en elaborarse, señala que se podrán conseguir importantes avances en la reducción de la pobreza si los países refuerzan su cooperación y avanzan en su compromiso.
El estudio añade que estas cifras no son significativas comparadas con el presupuesto militar de algunos gobiernos y con los elevados ingresos de muchos Estados.
Dirigido por el economista y profesor de la Universidad de Columbia, Jeffrey Sachs, el Proyecto del Milenio de las Naciones Unidas es un órgano asesor independiente cuya intención es reducir a la mitad la pobreza en el mundo.
Más de 1.200 millones de personas viven aún en condiciones de pobreza extrema, más de 850 millones padecen hambre crónica y más de cinco millones de niños mueren cada año por causas relacionadas directamente con la nutrición, según datos de la ONU.