LA PAZ, miércoles, 22 marzo 2006 (ZENIT.org).- La Conferencia Episcopal Boliviana (COB), mediante un mensaje dirigido este martes al pueblo boliviano, ha manifestado su posición frente al proceso de la Asamblea Constituyente.
El texto recuerda la urgencia de «garantizar y reafirmar la unidad del país, respetando siempre las autonomías, y los valores de la solidaridad, la verdad, libertad, justicia, transferencia, diálogo y respeto a la vida humana».
Para el próximo 2 de julio está prevista en Bolivia la elección de «Constituyentes» que tendrán a su cargo la elaboración de la Nueva Constitución Política del Estado.
Con el título «Construyamos una Bolivia para todos – Hacia la Asamblea Constituyente», el documento alienta a construir «un país solidario, fraterno, justo y de profundo respeto a la persona, por sobre todos los demás valores materiales».
Los obispos escriben su mensaje en cumplimiento de su misión y «siguiendo el ejemplo de Jesucristo, desde los principios y desde los valores humanos y cristianos», con el propósito de «ayudar a reflexionar en la construcción de una Bolivia con la fuerza del Evangelio».
La misiva analiza el deterioro social y político de los últimos años experimentado por el país en los que se ha visto un incremento de la pobreza, de la discriminación y la exclusión social de las mayorías.
Los obispos hacen ver que el voto de las mayorías ha creado un nuevo escenario político y ha despertado grandes esperanzas para mejorar la administración del Estado, mediante la Asamblea Constituyente.
Los obispos afirman que en la Constitución Política del Estado, en primer lugar, debe estar presente la dignidad humana por encima de la economía, de la política y de otros aspectos, y se debe garantizar el bien común, la subsidiaridad, tomando en cuenta lo nacional, regional y a todos los sectores del país, así como los derechos de los pueblos indígenas y originarios.
El mensaje señala también la urgencia de «rescatar la familia, el trabajo y la libertad que tienen los padres de familia para escoger la mejor educación para sus hijos».
A continuación hace un llamado «a todos los cristianos para que se comprometan en participar activamente en el proceso hacia la Constituyente, siendo críticos frente a los que buscan otros valores que no son los valores de los bolivianos, que no nos ayudan a humanizar».
La Iglesia pide al gobierno «obrar con imparcialidad, garantizar la representación equitativa de todos los sectores, crear un clima de confianza y serenidad en los ciudadanos».
Asimismo pide «a los medios de comunicación brindar su valioso aporte desde la ética, desde su profesionalidad y espíritu de servicio en la construcción de una Bolivia mejor, desde el respeto a la dignidad a la persona humana».
Alienta a los que serán nombrados miembros de la Asamblea Constituyente para que actúen «en conciencia de acuerdo a los principios éticos y valores fundamentales».
Por último, la Iglesia «hace votos para que este proceso de construcción de la integridad de nuestra patria boliviana se realice dentro del respeto, el diálogo, la concertación sincera superando rivalidades y enfrentamientos».
[El documento puede leerse en la página web de la Conferencia Episcopal de Bolivia, http://www.iglesia.org.bo]
