En declaraciones difundidas por el servicio de información religiosa SIR, el prelado revela que «en estos días se terminará de preparar el programa del viaje apostólico, que traerá muchos frutos, especialmente en el diálogo con los hermanos musulmanes».
De todos modos, el secuestro, cuyo autor fue Hakan Ekinci, de 30 años, preocupó al episcopado católico.
«Al inicio estábamos inquietos, pues se pensaba que, después de todas las polémicas surgidas tras el discurso de Ratisbona, se trataba de un intento de impedir la visita».
Este martes, añade, «un periódico turco había publicado un mensaje en el que Al Qaeda amenazaba con matar al Papa y los musulmanes que se atrevieran a salir a su encuentro».
«Después hemos sabido que se trata de un joven que no quiere hacer el servicio militar y que por este motivo ya había huido en otra ocasión», concluye.