El Papa citó en la homilía una famosa expresión de la nueva santa poco antes de morir, al ver los numerosos orfanatos y escuelas que estas religiosas habían abierto en el Estado norteamericano de Indiana: «¡Cuánto bien han hecho las Hermanas de Saint Mary of the Woods! ¡Cuánto más serán capaces de hacer si permanecen fieles a su santa vocación!»

Al final de la canonización, al rezar el Ángelus, el Papa deseó en francés que santa Theodore aliente a «vivir la fe y a dar testimonio ante nuestros contemporáneos, prestando cada vez más atención a los pequeños y a los más abandonados de la sociedad».