ROMA, viernes, 27 octubre 2006 (ZENIT.org).- Uno de los pioneros del diálogo interreligioso recuerda que en este 28 de octubre se celebran los 41 años de la declaración «Nostra Aetate» del Concilio Vaticano II sobre las relaciones de la Iglesia católica con el resto de las religiones no cristianas y ha destacado el papel del Papa Juan XXIII.
La declaración condenó el antisemitismo y promovió una nueva era de relaciones entre los creyentes de las diferentes religiones, explica Baruj Tenembaum, creador de la Fundación Internacional Raoul Wallenberg (http://www.raoulwallenberg.net/).
Juan XXIII convocaría el Concilio que publicaría el 28 de octubre de 1965, siendo Papa ya Pablo VI, esa histórica declaración «sobre las relaciones de la Iglesia con las religiones no cristianas».
«Este punto de inflexión en la historia de las relaciones judeo-católicas no fue el resultado del azar u oportunismo político; fue el testimonio que confirmó una nueva actitud hacia el pueblo judío. Una verdadera transformación originada en los sentimientos y profundo sentido de reconciliación de Juan XXIII», añade.
Por este motivo, Tenembaum creó en el año 2000 el Comité Angelo Roncalli para el reconocimiento de la acción humanitaria desplegada por el nuncio apostólico Angelo Roncalli, en favor de personas perseguidas por el régimen nazi.
Según los informes de las investigaciones llevadas a cabo por este Comité, informa el fundador, «Angelo Roncalli arriesgó su posición y seguridad al proveer miles de visas turcas, certificados de bautismo «temporales», y certificados de inmigración, autorizando la entrada a Palestina de judíos húngaros perseguidos por los nazis».
«De acuerdo a testimonios dados en el juicio de Nüremberg, sus intervenciones ayudaron a salvar decenas de miles de personas. Fuentes católicas señalan que alrededor de 80.000 certificados fueron otorgados. Roncalli también estuvo involucrado en el destino de judíos de Francia, Eslovaquia, Croacia, Bulgaria Rumania e Italia», informa Tenembaum.
Con la presencia del antiguo secretario de Estado, el cardenal Angelo Sodano, este Comité rindió homenaje a la memoria del Papa Juan XXIII el 7 de septiembre de 2000, en la Misión de Observación Permanente del Vaticano ante las Naciones Unidas en Nueva York. En esa ocasión, se anunció el lanzamiento del Comité Internacional Angelo Roncalli.
La Fundación Internacional Raoul Wallenberg editó en 2001 un trabajo de investigación sin precedentes que documenta las acciones en favor de perseguidos llevadas a cabo por el delegado apostólico en Estambul durante el Holocausto.