SUCRE, viernes, 9 enero 2008 (ZENIT.org).- Cuando faltan dos semanas para la consulta sobre la constitución, aprobada por los diputados de Bolivia, la Oficina de Prensa de la Conferencia Episcopal Boliviana emitió el 8 de enero un comunicado en el que toma distancia de algunas iniciativas de asociaciones autodenominadas cristianas.
En un contexto muy crispado, se multiplican otra vez, como en todos los momentos críticos que ha vivido la convulsa Bolivia, los ataques de medios de comunicación pro gubernamentales contra la Iglesia católica, calificando incluso a algunos obispos de «nuevos fariseos».
Mientras, surgen asociaciones «cristianas» muy ligadas a la línea gubernamental o algunas denominaciones hacen publicidad instando al pueblo a votar de una manera u otra a la propuesta de nueva constitución.
Los obispos exhortan más bien al entendimiento y al diálogo y piden al pueblo que estudie bien el proyecto de nueva carta magna y a los católicos que reflexionen, como bautizados, empeñados por tanto en el proyecto de Jesús.
El comunicado de la Conferencia Episcopal aclara a la opinión pública nacional que «la Iglesia católica no es miembro de la denominada Asociación de Iglesias Cristianas e Iglesias Re-Unidas (IU), ni forma parte de las campañas publicitarias que en los últimos días estas asociaciones han venido promoviendo, a través de spots televisivos acerca de la propuesta de nueva Constitución Política del Estado».
Así mismo deja claro que, por su parte, «la Iglesia católica ha exhortado oportunamente a la población boliviana a leer y conocer en profundidad la propuesta de texto constitucional para de esta forma emitir su voto en conciencia de acuerdo a la reflexión que cada ciudadano y ciudadana haya realizado».
Recuerda la nota que los obispos «han ofrecido anteriormente varias reflexiones sobre la nueva Constitución defendiendo los principios y valores de convivencia general, manifestando sus propuestas a la Asamblea Constituyente y analizando el texto aprobado en Oruro».
Del mismo modo, anuncia «que en los próximos días la Conferencia Episcopal emitirá un documento sobre el referéndum aprobatorio del próximo 25 de enero».
Hace un llamamiento «a los líderes sociales y políticos a no ahondar en divisiones, ni generar pugnas o enfrentamientos entre bolivianos, a través de mensajes y campañas que recurren a la guerra sucia y dañan la dignidad de la persona humana».
A los medios de comunicación y comunicadores recuerdan los pastores «su importante rol de información y orientación ciudadana, que en este tiempo de campaña, debe contribuir a un clima de serenidad, sentido crítico y responsable, sobre la base de una información veraz».
Y concluye la nota: «A todos los católicos y pueblo creyente hacemos un llamado a mantener la unidad y practicar la tolerancia entre hermanos».
Por Nieves San Martín
