LES COMBES, martes, 21 julio 2009 (ZENIT.org).- Benedicto XVI ha reivindicado los valores morales y educativos que deben caracterizar al deporte en un mensaje enviado este martes al Tour de Francia, que pasaba muy cerca de la casa en que veranea.
El Papa saludó "cordialmente" "a todos los corredores y a los organizadores de esta carrera", que en su decimosexta etapa dejó las fronteras francesas para atravesar Suiza e Italia, a unos tres kilómetros de Les Combes de Introd.
El Santo Padre ha ampliado su mensaje a "todos los deportistas actualmente comprometidos en diferentes competiciones, con el deseo de que el empeño en el deporte contribuya al crecimiento íntegro de la persona y no se desvincule del respeto de los valores morales y educativos".
El padre Federico Lombardi S.I., director de la Oficina de Información de la Santa Sede, que ha hecho público el mensaje del pontífice, ha explicado que con el mensaje el Papa ha querido unirse también a la alegría de la población del Valle de Aosta, quien ha seguido con enorme entusiasmo la carrera.
"Desde hace unos sesenta años el Tour no pasaba por el Valle de Aosta y, por tanto, es visto como un acontecimiento excepcional. Además, me han dicho que el primer vencedor del Tour de Francia fue un deportista del Valle de Aosta", ha explicado el portavoz en declaraciones emitidas por Radio Vaticano.
Por este motivo, revela, "se le ha sugerido enviar un mensaje y el Papa ha aceptado con gusto y ha enviado un saludo sencillo pero significativo".
La etapa entre Martigny y Bourg-Saint-Maurice, de 159 kilómetros, se la adjudicó el corredor español Mikel Astarloza (Euskaltel-Euskadi), mientras que el también español Alberto Contador (Astana) se mantiene al frente de la clasificación general.
Lombardi explica que en estas semanas del verano boreal tienen lugar en el mundo muchos campeonatos deportivos, en particular los Mundiales de Natación, en Roma, de modo que el Papa quiere también "alentar los valores positivos del deporte para el crecimiento de la persona".
El pontífice se encuentra desde el pasado 13 de julio en la residencia Les Combes, en la localidad de Introd, en el Valle de Aosta, donde permanecerá hasta el próximo 29 de julio.
El resto del verano, lo pasará en la residencia pontificia de Castel Gandolfo, que está situada a unos 30 kilómetros de Roma.