CIUDAD DEL VATICANO, viernes 23 de julio de 2010 (ZENIT.org).- Publicamos la carta de Benedicto XVI, dirigida al arzobispo Velasio De Paolis, S.C., en la que le comunicad su nombramiento como como delegado pontificio para los Legionarios de Cristo.
* * *
Al Venerable Hermano
Velasio De Paolis, C.S.
Arzobispo titular de Telepte:
La reciente Visita Apostólica a la Congregación de los Legionarios de Cristo ha puesto de relieve, además del celo sincero y de la fervorosa vida religiosa de un gran número de miembros de la Congregación, la necesidad y urgencia de un camino de profunda revisión del carisma del Instituto. Con el deseo de seguir de cerca, sostener y orientar tal camino, he considerado oportuno proceder al nombramiento de un delegado personal mío, como testigo tangible de mi cercanía, para que actúe en mi nombre ante esa Familia Religiosa.
Conociendo, venerable y querido hermano, su preparación y experiencia en el ámbito jurídico y eclesial, enriquecidos por un espíritu de servicio, solicitud pastoral y sentido de la vida religiosa, deseo confiarle a usted tal compromiso. Así pues, con la presente carta, lo nombro delegado mío para la Congregación de los Legionarios de Cristo, confiriéndole el encargo de gobernar en mi nombre tal Instituto Religioso durante el tiempo que sea necesario para completar el camino de renovación y conducirlo a la celebración de un Capítulo General Extraordinario, que tendrá como fin principal llevar a término la revisión de las Constituciones. Algunas modalidades adicionales para el cumplimiento de tal Oficio se indicarán mediante un específico Decreto.
Bien consciente de la importancia de la misión que hoy le confío, como también de la carga de responsabilidad que comporta, le agradezco desde ahora la disponibilidad y la generosidad que sin duda manifestará en este nuevo servicio a la Santa Sede, el cual no dejará de producir abundantes frutos positivos.
Mientras confío su persona, a los queridos religiosos de la Congregación de los Legionarios de Cristo y a los miembros del Movimiento «Regnum Christi» a la celestial protección de la Santa Virgen, Madre de la Iglesia, aseguro a todos mi cercanía espiritual en el afecto y la oración, y les mando de corazón mi especial Bendición Apostólica.
Del Vaticano, 16 de junio de 2010
Benedicto XVI
[Traducción del original italiano distribuida por la página web de los Legionarios de Cristo]