BRAGA, viernes 23 marzo 2012 (ZENIT.org).- Por quinto año consecutivo, se celebra el Día del Niño por Nacer en Braga, Portugal. Siempre se ha celebrado el 25 de marzo, pero como este año es domingo se celebrará el 26 de marzo.
La celebración tendrá lugar en la iglesia de Senhora-a-Branca, en Braga, con una misa a las 19 horas, donde se tendrán presentes a todos los niños que deberían haber nacido pero fueron eliminados, informa a ZENIT Carlos Aguiar Gomes, de la Militia Sanctae Mariae.
Los convocantes del encuentro recuerdan que el 25 de marzo de 1995, hace 17 años, el papa Juan Pablo II firmaba la carta encíclica Evangelium Vitae (El Evangelio de la Vida), sobre el tema de la vida humana, su valor y carácter inviolable que “ha de ser valientemente anunciado como buena noticia a los hombres de todos los tiempos y culturas” (cf. P.c.nº1).
El beato Juan Pablo II dedicó innumerables documentos, discursos y homilías a los temas que le eran especialmente queridos: la vida humana y la familia. Dejó también en este ámbito una herencia riquísima.
“Después de mi muerte, me gustaría ser recordado como el papa de la familia y de la vida”, dijo al cardenal Carlo Cafarra, cuando este presidía el Instituto Pontificio Juan Pablo II para el estudio del matrimonio y la familia.
Los convocantes del Día del Niño por Nacer constatan que, “entre los derechos más amenazados está el derecho a la vida de los niños por nacer a los que es negado el derecho a nacer, crecer y ser amados”.
“En Portugal –subrayan- son eliminados 53 bebés al día. Una hecatombre demográfica. Y no se contabilizan los abortos químicos, pues no hay posibilidad real y efectiva de contarlos”.