El director del Departamento de Ministerios Ordenados del episcopado colombiano, P. Juan Álvaro Zapata, recordó la tolerancia cero de la Iglesia Católica frente a casos de abuso a menores. “La Iglesia no tapa, no camufla, no omite, no permite y no comulga con abuso a menores» declaró en la presentación del Decreto de Prevención de Abuso contra Menores que empezó a regir en esta jurisdicción.
El sacerdote afirmó que la Iglesia ha creado mecanismos que buscan «prevenir, contrarestrar y afrontar estas realidades tristes y dolorosas». El decreto que se presentó el 29 de octubre tiene tres dimensiones: la recepción de las víctimas, seguimiento e investigación del caso y la determinación canónica. «La iglesia rechaza este tipo de actos, busca hacer justicia y por ello está poniendo todos los medios para cooperar con todas las investigaciones a nivel canónico y civil», subrayó el presbítero.
En esta línea, puntualizó que la Iglesia «está haciendo un trabajo fuerte y profundo en los seminarios» durante el proceso de discernimiento, acompañamiento y formación de los candidatos. De esta forma se asegura ordenar presbíteros que respondan y estén preparados para vivir su vocación con coherencia.
Al referirse a las causas que impulsan este tipo de actos explicó que la pedofilia y la Efebofilia son patologías y enfermedades que no provienen de la opción que hace una persona al renunciar a una vida sexual en pareja y opta por el celibato. «Es una realidad que siempre ha existido en la sociedad como un hecho pecaminoso y un delito. Lo han producido muchos hombres y mujeres de cualquier área. Surge en el ser humano de cualquier condición y cualquier dignidad. Esta realidad no depende de la vida celibataria, es fruto de una patología que es consecuencia de muchos factores», aclaró el sacerdote.
El P. Juan Álvaro Zapata destacó que la estructura del decreto y los procedimientos que en él se señalan son integrales porque implican a juristas, penalistas, psicólogos y asesores espirituales que orientan a las víctimas y a los denunciados. El decreto es fruto de líneas que emanaron de la última Asamblea Plenaria del episcopado colombiano realizado el mes de julio de 2013. Hasta el momento estas líneas se han convertido en decretos en las diócesis de El Espinal y en Tunja. El resto de las jurisdicciones están en proceso de publicar sus decretos. Una vez que es declarado decreto cualquier persona puede consultarlo.