La intención universal de oración del Papa Francisco para el mes de agosto es para que los «refugiados, obligados a abandonar sus casas por causa de la violencia, sean acogidos con generosidad y sean respetados en sus derechos».
Por otro lado, su intención de oración para la evangelización es para que «los cristianos en Oceanía anuncien con alegría la fe a todos los pueblos del continente».