El papa Francisco se ha reunido esta mañana con el presidente de la República de Armenia, Serzh Sargsyan. Y como es habitual en este tipo de encuentro, a continuación, el mandatario ha tenido un encuentro con el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado, acompañado por el secretario para las relaciones con los Estados, monseñor Dominique Mamberti.
En un comunicado facilitado por la Sala de Prensa del Vaticano, durante el coloquio con el Papa «se ha puesto de manifiesto la satisfacción por el desarrollo y el refuerzo de las relaciones bilaterales, subrayando el papel particular del cristianismo en la historia y en la vida de la sociedad armenia».
Con respecto a la situación política regional, «se ha deseado la superación de las complejas cuestiones sin resolver, a través del diálogo entre todas las partes interesadas». Además, prosigue el comunicado, «se ha abordado el tema de los conflictos en Oriente Medio, confiando en el esfuerzo común de las naciones y de las comunidades religiosas interesadas, para alcanzar la convivencia pacífica de los pueblos en toda la región».
Finalmente, se ha dedicado atención especial a la situación de las comunidades cristinas y de otras minorías religiosas en la zona, y a la crisis humanitaria relacionada con los refugiados procedentes de las zonas afectadas.