Los niños, niñas y jóvenes cuentan cómo están viviendo la guerra. En cuatro años, han muerto ocho mil menores. La población sigue siendo objetivo del fuego y 10 millones de sirios necesitan ayuda humanitaria para sobrevivir
La Iglesia, los padres y la patronal de centros católicos rechazan las críticas y consideran insuficiente el tiempo que se dedica e estas clases en algunas comunidades autónomas