El Santo Padre visitará las ciudades italianas de Prato y Florencia el próximo 10 de noviembre en ocasión del V Congreso Eclesial Nacional de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) que se celebra en Florencia del 9 al 13 de dicho mes y cuyo tema es »En Jesucristo el nuevo humanismo».
Prato es una localidad poco distante de Florencia, con una importante presencia extranjera –están registradas 123 nacionalidades distintas– pero es especialmente significativa la presencia china, lo que seguramente no habrá pasado desapercibido a un Papa que su pontificado ya ha viajado a tres países de oriente: Corea, Sry Lanka y Filipinas.
Los detalles de la visita han sido comunicados este viernes en dos ruedas de prensa realizadas en contemporáneo: una del arzobispo de Florencia, el cardenal Giuseppe Betori; y otra del obispo de Prato, monseñor Franco Agostinelli.
Según el programa inicial, no definitivo, el Papa saldrá del Vaticano en helicóptero y aterrizará en el campo deportivo de Prato donde encontrará al “mundo del trabajo” en la plaza de la Catedral. Allí pronunciará un primer discurso. De allí se dirigirá directamente a Florencia, irá a la Catedral para reunirse con los participantes del V Congreso eclesial de la Iglesia italiana y pronunciará su segundo discurso. A continuación legará a la Basílica Santísima Anunciación para un encuentro con los enfermos; después comerá con un grupo de pobres en el comedor de Francisco Pobrecito. Finalmente celebrará la misa en el estadio “Luigi Franchi”.
“Acogemos con grandísima alegría la noticia del Santo Padre en Prato. Toda nuestra diócesis está en fiesta por este evento que marcará nuestra historia: realmente Pedro visitará nuestra Iglesia y nos confirmará en la fe”, ha afirmado el obispo en declaraciones recogidas por la agencia SIR. Prato recibió también la visita de san Juan Pablo II en 1986, donde se reunió también con la población y en particular con el mundo laboral.
Por su parte, el cardenal Betori ha señalado otras dos cosas: que «al encontrar a los 2.300 delegados del Congreso eclesial nacional –obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos– encuentra a aquellos que representan la Iglesia italiana, podemos decir que encuentra a la ‘base'». Y en segundo lugar ha destacado que «será un encuentro con la realidad florentina en todo su territorio: encontrará la propia identidad de Florencia».
