El cardenal Andrew Yeom Soo-jung, arzobispo de Seúl, ha pedido al gobierno aprobar rápidamente la “marcha de las mujeres por la paz y la re-unificación de Corea” en la zona desmilitarizada que divide las dos Coreas, programada para el 24 de mayo próximo.
En una carta, el purpurado señala que “este evento sería un regalo maravilloso por el 70 aniversario de la separación”, tal y como indica una nota publicada en la agencia Fides.
Las activistas quieren llegar a la aldea de Panmunjom, que se encuentra en la zona fronteriza. El grupo ya ha recibido una respuesta positiva de las autoridades de Corea del Norte.
La solicitud para realizar la marcha fue enviada por el Premio Nobel, Mairead Maguire, fundadora del movimiento “Peace People”, junto con otras treinta mujeres que participan en las organizaciones que promueven la paz y el diálogo. Así, han hecho “un llamamiento a las instituciones coreanas para cumplir con su peregrinación simbólica el 24 de mayo, con motivo del Día Internacional de la paz y el desarme”.
Con el final de la Segunda Guerra Mundial en 1945, Japón se retiró y levantó su ocupación de Corea. El 8 de agosto, la declaración del Cairo señalaba que los japoneses se rendirían a los soviéticos al norte del paralelo 38º y a los norteamericanos al sur del mismo paralelo.
Corea del Norte se encuentra bajo un régimen comunista dirigido por Kim II Sung quien es considerado ‘El presidente eterno de la República’. Gobernó desde 1948 hasta su muerte, el 8 de julio de 1994. Le sucedió su hijo Kim Jong II. Le sucedió en 2010 su hijo menor, Kim Jong-Un, tras la caída en desgracia del hijo mayor, Kim Jong-Nam, que se exilió en Macao.
La guerra entre las dos coreas estalló el 25 de junio de 1950, cuando el Ejército Popular de Corea cruzó la frontera del paralelo 38 y a finales de agosto dominaba casi la totalidad de la península. Tras el contrataque de Estados Unidos, y la posterior intervención de China, hacia febrero de 1951 se estabilizó el frente en el paralelo 38.
El 27 de julio de 1953 se firmó un armisticio en Panmonjon, que restauró la frontera del paralelo 38 anterior a la guerra, si bien no concluyó en un tratado de paz definitivo.