El presidente de Cáritas Cuba, Mons. Jorge Enrique Serpa y de la directora de la institución, Maritza Sánchez en una carta firmada el 20 de diciembre piden a todos los directores de las Cáritas diocesanas, a solicitar apoyo ante la emergencia que sufren los emigrantes cubanos.
Ya lo han hecho Perú, México y Honduras, apoyando a Cáritas Costa Rica que a su vez solicita apoyo a la red de Cáritas Internationalis.
Costa Rica, está alojando desde hace un mes a unos 6.000 emigrantes cubanos que quieren llegar a Estados Unidos, pero a quienes Guatemala no les permiten transitar por su territorio.
El vicepresidente de Guatemala, Juan Fuentes, dijo hoy miércoles, que su país hace esfuerzos para buscar una pronta solución. Su país ha manifestado que dejaría pasar a los migrantes cubanos gradualmente por su territorio, si México garantiza por escrito que los va a recibir y que alguien se hará cargo de los gastos de trasladado hasta la frontera mexicana.
La crisis inició el 15 de noviembre pasado cuando Nicaragua impidió el ingreso a estos migrantes indicando riesgos a la seguridad y la soberanía, y acusó a Costa Rica de «manipular» la situación para legitimar las políticas migratorias estadounidenses que otorgan privilegios a los cubanos.
Estados Unidos por su parte indicó que sus leyes migratorias le impiden recibir a estos cubanos por medio de un puente aéreo, pues la ley de Ajuste Cubano, de 1966, establece que deben hacerlo vía terrestre, así como la ley llamada «pies secos/pies mojados» que devuelve a los migrantes interceptados en el mar.
A continuación la carta de Cáritas Cuba
Queridos hermanos y hermanas:
Cómo saben Cáritas de Costa Rica está comprometida con la respuesta a la crisis humanitaria que los emigrantes cubanos han suscitado en su país por las razones conocidas.
En estos momentos personas del equipo regional de MAGRE procedentes de las Cáritas de Perú, México y Honduras, están apoyando a Cáritas Costa Rica en la elaboración de un EA, es decir, una solicitud de apoyo ante esta emergencia a la red de Cáritas Internationalis.
Es nuestro deseo estar en comunión con estos hermanos nuestros durante todo el tiempo en que estén gestionando esta emergencia. Lo haremos a través de la oración, una oración en clave de Misericordia que es el sentimiento que nos anima durante este año Santo y que justamente se trata de un sentimiento fuerte. En relación con esto, recientemente tuvimos un sencillo retiro de adviento guiado por un hermanito de Jesús y Él nos decía:
“La Misericordia no es un sentimiento piadoso, es un sentimiento bello, noble pero sobre todo fuerte, capaz de transformar al hombre y la sociedad, capaz de sensibilizar al insensible”.
Necesitamos de alguna forma implicarnos en esta situación dolorosa que vive una parte significativa de nuestro pueblo. El reporte Nº1 de Cáritas Costa Rica a Cáritas Internationalis, refiere que desde Ecuador, se estima que 40 000 ciudadanos cubanos han llegado en meses anteriores con el fin de hacer la travesía terrestre hacia el norte. Hacen contacto conorganizaciones traficantes de inmigrantes (“coyotes”), para que les lleven hasta Estados Unidos. En el trayecto muchos han muertoahogados. La ruta del “Coyotaje “está plagada de riesgos y peligros como violaciones, asaltos, accidentes mortales, sometimiento a autoridades corruptas,etc.
Ante este doloroso escenario, debemos acercarnos a las personas que sepamos decididas a salir de nuestro país por vías irregulares,escucharlas y aconsejar que se informen sobre los peligros que esta decisión supone para su integridadpersonal y más si ha decidido salir en familia.
Queridos hermanos, en los albergues de Costa Rica hay numerosos niños, bebes, mujeres embarazadas y para seguir su ruta, están contactando con los coyotes y arriesgando sus vidas.
En estos momentos que coinciden con la celebración de la Navidad, la Sagrada Familia, la Epifanía del Señor, con todo lo que de significación tienen para nosotros estas fiestas, nuestros conciudadanos están desprovistos como María y José en Belén y tenemos que agradecer a la Iglesia de Costa Rica que les han ofrecido posada.
Cuando la sagrada familia nos muestra una vida sencilla, armónica y animada por el amor filial que viene de Dios, estas familias están en situación de riesgo y los que están solos, han dejado las suyas fracturadas. El sufrimiento, el temor, la desesperanza, encuentran terreno fértil en estas personas, por tanto, es hora de compasión, es hora de misericordia, es hora de oración y es hora de mostrar a Cristo como camino, verdad y Vida.
Pongamos a todas estas personas y sus familias ante el santísimo, coloquémosla en la patena durante la Eucaristía, coloquémosla en nuestra mesa donde compartiremos con alegría el regalo del misterio Navideño con nuestras familias y amigos..
Y sobre todo pongamos manos a la obra confiados en el Niño de Belén que viene a nuestro encuentro en este tiempo, propicio para sembrar Amor, reconciliación, Esperanza, Armonía. Que el Señor nos mantenga unidos en su amor y nos confirme en la FE.
