Los nueve consultores teólogos de Cuba que se ocupan de la causa de beatificación del siervo de Dios José Wech Vandor (1909-1979) han dado el 26 de febrero su parecer positivo por unanimidad.
La ‘positio’ sobre la vida virtuosa del sacerdote salesiano, misionero en Cuba desde 1936 hasta su muerte en 1979, ha tenido como relator al padre Zdzislaw Kijas, OFM Conv., y como colaboradora a la doctora Ludovica María Zanett.
Lo informa la diócesis de Santa Clara, en la página web de los obispos de Cuba, precisando que “la positio presenta en modo crítico y en profundidad todo lo que comprueba, documenta y testifica lo relativo a las virtudes heroicas del siervo de Dios”.
La misma consta de cuatro partes: la breve presentación por parte del relator; la Informatio, es decir, la parte teológica en la cual se comprueba que el siervo de Dios ha practicado de manera heroica todas las virtudes cristianas; el Summarium, un resumen con las pruebas de los testigos y documentos; y la biografía crítica.
José Wech nació en Hungría el 29 de octubre de 1909. Cambió su apellido por “Vandor”, que significa ‘peregrino’ en su lengua natal. Al ser ordenado sacerdote en 1936, fue enviado a Cuba como misionero salesiano.
En 1954 se trasladó a la ciudad de Santa Clara, en el centro del país, para fundar una nueva Obra Salesiana con la construcción del Colegio Salesiano “Rosa Pérez Velasco”, instalándose en la iglesia del Carmen.
Su labor pastoral y educativa durante décadas difíciles de la nación cubana, todavía queda en el recuerdo de las personas que lo conocieron y que han promovido su figura para que su huella no se pierda en la Historia. El misionero de Don Bosco falleció el 8 de octubre de 1979, después de sufrir durante varios años una enfermedad degenerativa que fue consumiendo su vida poco a poco.
