Al mismo tiempo, el cardenal Blázquez, al referirse al trabajo de la Asamblea Plenaria en torno a la orientación de la pastoral familiar con la ayuda de la exhortación Amoris Laetitia, agradece al Santo Padre “el excelente documento, que es un servicio extraordinario a la Iglesia y una inestimable ayuda a la humanidad ante los desafíos que padece actualmente la familia”.
La carta finaliza expresando a Francisco“nuestra comunión cordial y obediente” y expresa la petición “al Señor que continúe alentando su dedicación abnegada al ministerio que le ha confiado». El purpurado asegura el Papa que cuenta «con nuestra cercanía y apoyo en las dificultades y las pruebas que la fidelidad al Evangelio le exija». Gracias –concluye la misiva– por su ejemplo que nos ilumina en el camino.