(ZENIT – 22 feb. 2018).- La búsqueda de «soluciones» para «lograr el ambicioso objetivo de poner fin a la práctica de la detención de niños» es el llamamiento del Obispo Bernardito Auza, Observador Permanente de la Santa Sede en las Naciones Unidas en Nueva York.
Habló sobre «Poner fin a la detención de niños migrantes y refugiados: determinación de mejores intereses y alternativas a la detención», en una mesa redonda organizada por la Santa Sede en la Sede de las Naciones Unidas el 21 de febrero de 2018.
Señalando que «en algunos lugares, han surgido alternativas a la custodia de los niños y se están utilizando con éxito», el Obispo Auza propuso «considerar cuidadosamente estas mejores prácticas hoy, con la esperanza de que puedan ser extendido y reproducido en otro lugar».
«Esperamos» –agregó– «que estas alternativas proporcionen una visión de cómo se vería esto y qué se debería hacer para lograr el ambicioso objetivo de poner fin a la restricción infantil».
«La detención de niños migrantes y refugiados», comentó el observador permanente, «se produce a pesar de la evidencia de la nocividad de esta práctica para los niños y su desarrollo, ya pesar del creciente consenso internacional, reforzado por la jurisprudencia internacional y regional, que la detención de niños en inmigración nunca es lo mejor para ellos».
«Tampoco está en el mejor interés de los estados, agregó, porque es costoso y oneroso y rara vez disuade a los migrantes potenciales».
Con Hélène Ginabat
Niño refugiado © Un.org
ONU: "Poner fin a la práctica de la detención de niños", llamada de Mons. Auza
Mesa redonda organizada por la Santa Sede en las Naciones Unidas