(zenit – 19 marzo 2020)-. El coronavirus ha llegado a los 50 estados norteamericanos, además de la capital federal Washington D.C, informa la edición de L’Osservatore Romano del 19 de marzo de 2020.
El 17 de marzo el gobernador de Virginia Occidental, Jim Justice, anunció el primer caso de contagio de Covid-19 en su estado. Como consecuencia, dada la impresionante progresión en términos de contagio, todo el territorio de los Estados Unidos (EE.UU.) vive en situación de emergencia sanitaria vinculada a la propagación del coronavirus.
A día de hoy, el país presenta unos 9464 casos, de acuerdo al portal mundial de estadísticas Worldometer. El número de muertos en este momento ha aumentado a 155 y el de recuperados es de 108, de acuerdo a la misma estadística.
Medidas estatales y federales
El secretario del Tesoro de EE.UU., Steven Mnuchin, pidió la aprobación de un paquete de medidas económicas por parte del gobierno que inyectará “un billón de dólares en la economía americana” y hará frente a un desempleo que podría llegar al 20%, indica el citado medio vaticano.
La Reserva Federal (FED), por su parte, después de la decisión de llevar el precio del dinero a un nivel cercano a cero, anunció que ayudará a las empresas con dificultades de liquidez en este momento de parálisis de los mercados.
Declaración de los obispos
En medio de estas circunstancias el Comité Ejecutivo de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos emitió una declaración en apoyo a Catholic Relief Services, CRS, (Servicios de Socorro Católicos).
“En nombre de nuestra fe católica, los donantes, el personal y los voluntarios de CRS proveen alimentos, medicinas, refugio y capacitación para salvar las vidas de nuestras hermanas y hermanos más vulnerables en todo el mundo. Ellos hacen este trabajo a menudo en lugares tan remotos y peligrosos que la mayoría de las personas temerían visitar. Extendemos nuestras oraciones y agradecimientos por este valiente testimonio de la misericordia de Cristo”, expresan los prelados.
Defensa de la vida
Del mismo modo, recuerda que los esfuerzos de ayuda humanitaria de CRS “se basan en las enseñanzas amorosas de la Iglesia Católica”, comprometida” con la firme defensa de la vida”.
Ante las críticas, la nota señala que, “no deberían restarle importancia al poderoso impacto que las donaciones tienen en la vida de las poblaciones en sufrimiento, que de otro modo ya habrían sido olvidadas”.
Confianza y apoyo
Los miembros del episcopado estadounidense muestran su confianza “en el exhaustivo sistema de investigación utilizado por CRS mediante el cual se investigan las quejas y se toman medidas correctivas, si es necesario” y resaltan que CRS trabaja junto con “otras agencias de ayuda que pudieran no compartir nuestras enseñanzas. En estos casos, CRS mantiene su trabajo distinto”.
Finalmente, transmiten su firme apoyo al personal de CRS “en su solidaridad con las minorías entre nosotros. Juntos, afirmamos lo sagrado de cada vida humana desde el momento de la concepción hasta la muerte natural”.