(zenit – 7 abril 2020).- El pasado Domingo de Ramos, Mons. Domingo Ulloa Mendieta, arzobispo de Panamá, sobrevoló la arquidiócesis en helicóptero y bendijo a los fieles con el Santísimo Sacramento, informó la citada circunscripción de la Iglesia panameña en un comunicado.
Se trata de un hermoso gesto con la feligresía del país debido la suspensión de la celebración de la Misa de forma pública y con asistencia de fieles para evitar la propagación del coronavirus.
Domingo de Resurrección: nueva bendición
Según Vatican News, el acto empezó en la base aérea local, donde el arzobispo rezó arrodillado delante del Santísimo Sacramento y de la estatua de Santa María la Antigua, patrona de Panamá.
Posteriormente, siguiendo la normativa anti-contagio, se puso la máscara quirúrgica y llevó la custodia en procesión hasta el helicóptero, acompañado por dos militares con la estatua mariana. El helicóptero sobrevoló a baja altura para mostrar cercanía con la población.
Asimismo, Mons. Ulloa anunció que el próximo Domingo de Resurrección, recorrerá las calles de la ciudad en el papa móvil con la Custodia portando a Jesús Sacramentado, “quien estará más cerca de los más necesitados sobre todo en los hospitales y en esos lugares marginados”.
“No cerremos la puerta a Jesús”
“En este Domingo de Ramos, abramos nuestro corazón, no le cerremos la puerta a Jesús. Él quiere habitar en ti, si así lo quieres. Solo basta un corazón arrepentido y se alegrará con tu regreso, como lo hizo el Padre con el hijo pródigo”, resaltó Mons. Ulloa desde la base aérea local antes de sobrevolar el territorio diocesano.
Pidió por que el Señor siga bendiciendo a Panamá y sacando la nobleza del pueblo panameño: “dispongámonos a recibir en el interior de nuestras casas esta bendición especial, que les llegará desde los cielos” y “especialmente para que cada panameño pueda asumir su gota de responsabilidad y solo hay una forma de vencer esta pandemia, es que cada uno de nosotros nos convirtamos en un muro infranqueable, y que por eso hemos de quedarnos en casa, por los míos, por los tuyos y por Panamá”.
Igualmente, agradeció a los periodistas por su “gran misión” de informar a la sociedad en esta situación complicada por la pandemia de la COVID-19, sin olvidarse del esfuerzo llevado a cabo por los científicos y los militares.
Descubrir la presencia de Cristo
“Que esta Semana Santa nos haga reflexionar precisamente a descubrir la presencia de Cristo en cada uno de esos enfermos, el personal sanitario, los estamentos de seguridad, de aseo que cada día arriesgan sus vidas, contra el coronavirus acatando las normas que seguridad nos está ofreciendo para quedarnos en casa”, destacó monseñor Ulloa.
“Jóvenes, siéntanse llamados y no tengan miedo de gastar sus vidas por Dios y por los demás. En realidad, al hacerlo, ganarán la vida misma, porque ella es un regalo que se recibe donándose a sí mismos. La mayor alegría, de hecho, es amar incondicionalmente, como hizo Jesús en la Cruz, por nosotros”, concluye el arzobispo de Panamá, invitando a rezar por los enfermos y los necesitados.