(zenit – 24 abril 2020).- Ante la crisis económica provocada por el coronavirus, los obispos paraguayos solicitan a las autoridades “la administración transparente y la distribución equitativa de los recursos económicos que se han destinado para la asistencia social”.
Esta demanda formar parte de una exhortación titulada “Denles ustedes de comer”, elaborada por el Comité Permanente de la Conferencia Episcopal Paraguaya y dirigida al país y a sus autoridades.
Recesión económica prolongada
En ella, los prelados manifiestan que si bien “los esfuerzos por aplanar la curva de difusión de esta enfermedad han tenido el resultado esperado, según los entendidos, en la contención sanitaria”, son conscientes de que “el plan de contención de la pandemia seguirá por varios meses más”.
Del mismo modo, sostienen que “los intentos por mitigar el impacto en la economía familiar y en la economía nacional, urgen una respuesta ponderada, ordenada y sostenible”, ya que “las perspectivas anunciadas por los economistas, pronostican un horizonte de austeridad y de recesión económica, que ya angustian a la población”.
Acompañamiento a las familias
Frente a este análisis, los miembros del episcopado paraguayo sienten “la urgencia de un acompañamiento cercano a las familias y a los grupos más vulnerables, no solo con alimentos, sino también con asistencia para una recuperación efectiva económica a corto, mediano y largo plazo”.
Al mismo tiempo, consideran que, tras el primer pico, es preciso preparar el sistema de salud para la nueva etapa de la pandemia y que se deben iniciar “acciones para paliar y sanar la crisis alimentaria y económica que acompaña el desarrollo de las medidas de aislamiento social”.
Vulnerabilidad y fragilidad
Después, la exhortación señala que la vulnerabilidad y la fragilidad de un amplio sector de la población, “se ve y se verá agravada en los próximos meses y no podemos aún dimensionar su alcance y gravedad”, pues “el hambre es un clamor actual, que no podemos desoír, mientras discernimos los caminos a seguir”
E indica que la Pastoral Social Nacional y las pastorales sociales de cada diócesis “están trabajando sin pausa con el apoyo de voluntarios y asociaciones civiles, para llevar auxilio a nuestros hermanos”.
No obstante, los pastores se muestran preocupados porque la seguridad social “se vea afectada al ir agravándose las necesidades, que no encuentran una atención”.
Trabajo conjunto
Con el fin de “enfrentar con prontitud y solvencia las condiciones de necesidad extrema de la población vulnerable de todo el país”, la Conferencia Episcopal Paraguaya exhorta y recomienda que todas las instituciones públicas del área social del Gobierno central y departamental trabajen conjuntamente “para que las familias reciban con urgencia alimentos en cantidad suficiente y de manera sostenida mientras duren las medidas de restricción”.
Por último, los obispos reiteran su “predisposición para colaborar, mientras seguimos orando con intensidad para que Dios nos auxilie y nos ayude a superar solidariamente las consecuencias de esta pandemia”.