(zenit – 13 agosto 2020)-. La Conferencia Episcopal de Bolivia, junto con la Organización de las Naciones Unidas y la Unión Europea, reciben “con beneplácito la grata noticia de la aprobación de la Ley que refrenda la fecha del 18 de octubre como el plazo final para la realización de las elecciones generales 2020”.
Además, firmaron en calidad de testigos un acta testimonial por la sanción del Senado de Bolivia del proyecto de Ley que define dicha fecha como el plazo máximo para los comicios, contribuyendo a la pacificación del país, informa Iglesia Viva.
Retomar la convivencia pacífica
En un comunicado conjunto resaltan “la buena disposición por parte de la Asamblea Legislativa Plurinacional, el Órgano Ejecutivo, así como otros actores políticos y sociales”.
Ante este nuevo escenario, la nota expone que “están dadas las condiciones para que todos los sectores retomen el camino de la convivencia pacífica, respetuosa y exenta de violencia”.
Asimismo, consideran que “la contienda democrática y el diálogo son los instrumentos para el fortalecimiento de una sociedad justa, progreso en paz, entendimiento, salvaguarda a los derechos humanos y respeto entre todos”.
Finalmente, el comunicado señala que es “el momento de responder juntos con actitud dialogante y constructiva a los desafíos del país” y las organizaciones reiteran “su compromiso indefectible con una Bolivia democrática y en paz” y que continuarán apoyando “todos los esfuerzos de diálogo para alcanzar tal objetivo”.
Antecedentes
Desde hace una semana, Bolivia sufre una ola de protestas en contra del aplazamiento de las elecciones, poniendo en alto riesgo a la población.
Frente a ello, el pasado 11 de agosto, la CEB, la UE, y la ONU, emitieron un comunicado en el que demandaron respuestas efectivas “en favor de la vida y la defensa de los Derechos Humanos de todos los habitantes de esta tierra”.
En él expresaron su pleno apoyo al Tribunal Supremo Electoral y reiteraron su acompañamiento “a los esfuerzos que ha estado realizando para lograr consensos entre los actores políticos y sociales que contribuyan a fortalecer la institucionalidad democrática y el proceso electoral”.
También realizaron un llamado a los sectores movilizados, “que están bloqueando caminos a deponer aquellas actitudes en bien de la convivencia entre bolivianos y bolivianas” e instaron a levantar “toda medida de presión indebida”.