(zenit – 17 agosto 2020).- La arquidiócesis de Managua declara septiembre como mes de ayuno y oración, así lo expresó el consejo presbiteral de la arquidiócesis de Managua expresa a través de un mensaje pastoral, publicado en la solemnidad de Nuestra Señora de la Asunción.
Los pastores manifestaron su “gratitud por la amplia manifestación de comunión eclesial y solidaridad de personas, instituciones eclesiales y sociales a nivel local e internacional, ante el sacrílego atentado” ocurrido el pasado 31 de julio del corriente año, en la Capilla de la consagrada e histórica Imagen de la Sangre de Cristo.
La Sangre de Cristo, objeto del ataque, se ha convertido en una imagen conmovedora de la Iglesia sufriente en el país que, desde abril del 2018, viene sufriendo una crisis política y social que tiene polarizada a la sociedad del país centroamericano.
“Deseamos mantener el espíritu de reparación, ayuno y oración, implorando perdón y misericordia para las almas de aquellos que desean conducir a nuestra sociedad por caminos de odio, confrontación, ofensa y descalificación”, expresaron.
Mes de ayuno y oración
En el mensaje, los sacerdotes de Managua invitan a los fieles a que el próximo mes de septiembre vivan “un mes dedicado a orar para sanar y disponer la voluntad y la conciencia de los hijos de esta patria, pidiendo a nuestra Madre y Reina de Nicaragua, nos “proteja con su manto salvador” y logre por la gracia de Dios “que los nicaragüenses seamos artesanos de paz” dice el documento.
Piden, además, a la sociedad dar “pasos decididos y efectivos por las sendas de una cultura de entendimiento, que permita heredar al presente y futuro de esta nación una verdadera concordia, paz, justicia, respeto a los derechos fundamentales del ser humano”.
Unir esfuerzos y colaboración para reconstruir la capilla de la Sangre de Cristo
El consejo presbiteral pidió a los fieles nicaragüenses “unir esfuerzos de oración y colaboración desde nuestras posibilidades, para apoyar decididamente lo que nuestro arzobispo promueva, después de consultar a los expertos, sobre la reconstrucción de la capilla y restauración de la consagrada e histórica Imagen de la Sangre de Cristo”.
Aunque las autoridades de la Policía Nacional en Nicaragua ya dieron por cerradas las investigaciones del acto terrorista, el arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, ha condenado la acción y ha dicho que es importante que “se realice una investigación profunda sobre los ataques contra la fe del pueblo católico, para esclarecer quienes son los autores intelectuales y materiales de este acto macabro y sacrílego”.