(zenit – 22 dic. 2020)-. El próximo viernes 25 de diciembre de 2020, para la Navidad, el Papa Francisco pronunciará su mensaje navideño desde la Sala de las Bendiciones del Palacio Apostólico del Vaticano. Luego dará la bendición Urbi et Orbi para la ciudad de Roma y para el mundo, desde la misma sala, en vivo en Internet y a través de los medios de comunicación.
Se sabe que, incluso a través de los medios de comunicación, la bendición Urbi et Orbi confiere la “indulgencia plenaria” en las condiciones habituales que ofrece la Iglesia, a saber, la renuncia al pecado, la comunión sacramental y la reconciliación, y la oración por las intenciones del Santo Padre.
Por lo tanto, Francisco renuncia a la tradicional entrega de la bendición navideña desde la «logia» de bendiciones de la basílica de San Pedro: es comprensible que esto hubiera causado una multitud y un riesgo de contagio. Es conocido que dos cardenales del séquito del Papa acaban de ser declarados afectados por el virus, lo que atestigua la circulación del virus.
El Vaticano anuncia esta medida en línea con las “nuevas restricciones adoptadas para contener la propagación de la pandemia COVID-19”, según ha comunicado la Prefectura de la Casa Pontificia.
Otras cinco citas del Papa están previstas en ausencia de fieles, pero esta vez en la biblioteca del Palacio Apostólico del Vaticano: No habrá ninguna reunión en la plaza de San Pedro ni para el Ángelus del día de san Esteban, el sábado 26 de diciembre, ni el domingo 27 de diciembre.
Asimismo, no habrá reunión en la plaza de San Pedro para el Ángelus del viernes 1 de enero, fiesta de María Madre de Dios, del domingo 3 de enero, y de la Epifanía, que seguirá celebrándose en el Vaticano el miércoles 6 de enero de 2021.