(zenit – 23 dic. 2020).- El Papa Francisco ha animado en esta Navidad a contemplar “con corazón de niños” y “en silencio del orante” el signo “hermoso del pesebre”, y ha pedido al Señor que conceda “acoger con corazón puro y extasiado el modo maravilloso que Dios escogió para venir al mundo”.
El Santo Padre ha rogado a la Virgen y a san José que alcancen del Niño Jesús “la gracia de que renazca en nuestro corazón la ternura, para abrazar con amor a todos, como verdaderos hermanos y hermanas”.
Estas peticiones han sido realizadas por el Papa en su habitual saludo a los peregrinos de lengua española, de España y Latinoamérica, a lo largo de la audiencia general de este miércoles de la cuarta semana de Adviento, en vísperas de la celebración de la Nochebuena.
“Vivir mejor” la Navidad
La catequesis de este miércoles ha sido transmitida desde la biblioteca del Palacio Apostólico, sin público, debido a la pandemia de COVID-19. Francisco ha interrumpido la serie dedicada a la oración para abordar el tema de la Navidad.
En ella, el Pontífice ha querido compartir con los fieles de todo el mundo una serie de reflexiones para “vivir mejor el nacimiento del Señor” y ha invitado imitar a los pastores a la hora de obedecer “al anuncio del ángel” e ir “espiritualmente también nosotros a Belén, donde en la pobreza de una gruta, María dio a luz al Salvador del mundo”.
El Obispo de Roma ha explicado que la fiesta de la Navidad “nos invita a contemplar, por una parte, el drama del mundo, en el que el hombre herido por el pecado busca misericordia y salvación, y por otra, la bondad de Dios que vino a su encuentro, para hacerlo participar de su amistad y de su vida”.