(ZENIT Noticias / Wisconsin, 25.11.2021).- Entre las poco más de 40 personas que resultaron heridas por el atropellamiento del pasado domingo 21 de noviembre, en el contexto de un desfile navideño, se encontraba un sacerdote católico así como feligreses y niños de una escuela católica en Waukesha. Estos datos fueron dados a conocer por medio de un comunicado publicado en la página de Facebook de la diócesis de Milwaukee. El sacerdote herido fue el P. Pat Heppe.
De acuerdo a declaraciones recogidas en el periódico diocesano, la directora de comunicación de la comunidad católica de Waukesha, Mónica Cárdenas dijo: «Somos conscientes de que los feligreses están heridos, hemos estado en contacto con las familias y esos son realmente todos los detalles que podemos dar». Sobre el P. Heppe se reveló que se trató sólo de heridas leves por lo que un día después del atentado fue dado de alta del hospital.
El desfile del domingo 21 era el primero en que participaba la comunidad católica que incluye a las parroquias de St. John Neumann, St. William, St. Mary y St. Joseph, así como Catholic Memorial High School (CMH) y Waukesha Catholic School System (WCSS). “Estas cosas no pasan aquí. Creo que la gente simplemente está enojada, tiene miedo. Son cosas que suceden en las grandes ciudades y en las zonas de guerra. Aunque hemos visto cosas desastrosas como Columbine y Sandy Hook, eso fue en otro lugar. Ahora está aquí, en nuestra ciudad, y da miedo», declaró el P. Chuck Wrobel, quien también estaba presente en el desfile.
Los sacerdotes de la zona constataron, por otra parte, que la asistencia a las parroquias un día después del accidente fue superior a la media ordinaria. “Teníamos feligreses que estaban en el desfile allí y hubo mucho apoyo de los compañeros”, dijo Mónica Cárdenas. “Esta es una comunidad muy unida. (Estamos) todavía aceptando que esto sucedió. Todavía estamos en una fase de conmoción y descubrimiento. Las preguntas en este momento son: ¿quién está herido y cómo puedo ayudar?», agregó.
Ante los acontecimientos, el Papa se hizo presente por medio de un telegrama en el que expresó su cercanía y condolencias a las familias, por medio del obispo de la zona. Aunque el perpetrador del atentado está identificado, no han sido explicitadas las razones de estos actos que afectaron especialmente a mujeres y niños. Hay al menos 6 muertos y la policía descartó la calificación de atentado terrorista.