Por: Stefano Gennarini
(ZENIT Noticias – Center for Family and Human Rights / Guatemala, 24.03.2022).- Líderes religiosos y organizaciones pro-vida de todo el continente Americano alabaron a Guatemala en una ceremonia de reconocimiento de la pequeña nación centroamericana como la capital pro-vida de Latinoamérica.
«Para vivir en paz necesitamos respetar la vida desde su concepción. Esto es lo requerido por la Constitución», dijo el presidente Alejandro Giammattei durante el evento del miércoles. «Cuando tenemos fe, es nuestra fe quien lo demanda no solo la ley», dijo emocionadamente. «Hoy, decimos ¡no a la Guerra, si a la Vida!», exclamó, refiriéndose a la Guerra en curso en Ucrania.
Durante la ceremonia, el Congreso de Guatemala designo el 9 de marzo como día nacional por la Vida y la Familia y las Iglesias evangélicas declararon a Guatemala la capital pro-vida de Latinoamérica. Una escultura conmemorando esto fue descubierta durante la ceremonia pagada enteramente por Giammattei y el patio del Palacio Nacional fue rebautizado como el patio por la vida durante la ceremonia.
A pesar de ser fuertemente criticado por sus oponentes, Giammattei dio una nota conciliatoria entre sus comentarios.
«Este es un día para estar unidos. También escuchamos a los que disienten. Pero les pedimos a todos los guatemaltecos que se unan para construir el país».
Varios pastores de las Iglesias evangélicas, un Imán y un Rabí se lo agradecieron a Giammattei en la ceremonia del miércoles. El Nuncio Apostólico, Francisco Montecillo Padilla representante personal del Papa en un país mayoritariamente evangélico, lo apreció mucho.
«No debemos cansarnos de presentar la verdad acerca de la familia tal como Dios quiso en el momento de la Creación, una y otra vez» dijo, añadiendo que esto supone ir contra la cultura dominante y solicitó «paciencia, esfuerzo, sacrificio y la búsqueda constante del mutuo entendimiento». Giammattei es católico pero muy querido por los evangélicos por su fuerte apoyo a la vida y la familia.
En 2019, su gobierno adopto una política nacional que mejora las protecciones a la maternidad, a los no-nacidos, refuerza la vida familiar y promueve valores familiares. También ha tomado firmes posturas pro-vida internacionalmente y en la ONU incluyendo el adherirse a la Declaración de Consenso de Ginebra.
Habló con seriedad sobre sus convicciones pro-vida y sus luchas políticas a los pastores de 400 iglesias evangélicas del Congreso Iberoamericano por la Vida y la Familia el jueves, mientras se reunían en sesión plenaria.
Giammattei, que padece esclerosis múltiple y camina con muletas, ha tenido carreras exitosas como médico, en los negocios y en el gobierno. Sin embargo, tuvo que luchar contra su enfermedad desde el principio. Dijo que intentó suicidarse cuando le diagnosticaron esclerosis múltiple a los 23 años, en su último año de carrera de medicina. Encontró a Dios en esa crisis cuando dejó de protestar contra Dios y empezó a pedirle que le revelara su propósito.
Giammattei atribuyó la feroz oposición a su presidencia a sus convicciones pro-vida y pro-familia. Sus oponentes políticos lo mantuvieron en prisión durante diez meses antes de que pudiera llegar a la presidencia. Las críticas a su política no hicieron más que darle más seguridad, dijo, y añadió que, a pesar de todos los problemas que ha tenido, duerme como un bebé por las noches porque tiene su conciencia limpia. Líderes pro-vida de todas las Américas asistieron a los eventos.