(ZENIT Noticias / Mumbai, 03.01.2024).- Hay temor entre pastores cristianos y sacerdotes católicos en el Estado de Karnataka por el aumento de ataques contra las iglesias y sus miembros. Este incremento es confirmado por la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada en su nuevo informe, elaborado por tres organizaciones de derechos civiles de India y presentado el pasado 23 de diciembre.
Las investigaciones muestran persecución a los cristianos por su fe «en 21 de los 28 estados» de India. Se tiene conocimiento comprobado de «305 incidentes de violencia, solo en los primeros nueve meses de 2021». En muchos casos, se trata de turbas que agreden a los creyentes. Hubo «28 casos de daños infligidos a lugares de culto cristianos, incluidas iglesias».
Un caso entre muchos es el padre Francis D’Souza, sacerdote de una iglesia local en Belagavi, quien expresó que un varón intentó agredirle con una espada hace una semana. Altos funcionarios policiales investigan el caso y aseguraron protección al padre D’Souza. «Pero el miedo sigue presente en mí», comunicó el padre.
Un oficial de policía, que habló bajo condición de anonimato, dijo a la BBC que, si bien las estaciones de policía individuales han aconsejado a los sacerdotes que tengan cuidado, no existe una «política estatal» sobre el tema.
A. C. Michael, coordinador Nacional del United Christian Forum y miembro del equipo que publicó el nuevo informe, y exmiembro de la Comisión de Minorías del estado de Delhi, advierte que las cifras son indicio de «que la violencia organizada contra los cristianos se está extendiendo por todo el país». El informe fue elaborado por United Against Hate (Unidos contra el odio), Association for Protection of Civil Rights (Asociación para la Protección de los Derechos Civiles) y United Christian Forum (Foro Cristiano Unido).
Los cristianos son una pequeña minoría, 2,3% de los 1.300 millones de habitantes, en comparación con la abrumadora mayoría hindú, religión predominante y oficial. Según el nuevo informe, los extremistas hindúes atacaron también a las cristianas, con más de 1.331 mujeres heridas, «entre ellas 588 de comunidades indígenas y 513 mujeres dalits» o intocables, los más inferiores en el sistema de castas hindú, relegados a trabajos marginales, muy discriminados y víctimas frecuentes de violencia y asesinatos.
Hay fuerte controversia sobre la conversión religiosa en India. Los grupos conservadores acusan a los misioneros cristianos de convertir por la fuerza a los hindúes pobres, ofreciéndoles dinero u otros apoyos, incluso sobornos. Pero los dalits se convierten al cristianismo por la acogida de caridad que reciben, distante de la rígida jerarquía de castas hindúes. Son protegidos por la ley, pero no cesa su discriminación y la violencia que reciben.
El Informe de Libertad Religiosa 2021 de Ayuda a la Iglesia Necesitada explicó que se persigue a los cristianos en India por apología y supremacía étnica y religiosa, presionando para establecer políticas contra las minorías religiosas, reduciendo a los cristianos a ciudadanos de segunda clase.
Asimismo, el nuevo informe comenta que «septiembre fue el peor mes para los cristianos en la India, donde sufrieron 69 ataques violentos, seguidos de 50 en agosto, 37 en enero, 33 en julio, 27 en marzo, abril y junio, 20 en febrero y 15 en mayo». En los estados de idioma hindi «como Uttar Pradesh, Chhattisgarh, Jharkhand y Madhya Pradesh, se registraron 169 incidentes de violencia contra los cristianos en el mismo periodo».
Y en el Estado de Karnataka, pacífico hasta hace poco, «también se ha vuelto hostil a los cristianos (…). Tras la llegada al poder del partido nacionalista hindú Bharatiya Janata (BJP)», se han registrado 32 actos de violencia. El BJP ha llegado al poder en Karnataka y anunció la elaboración de una ley rigurosa contra la conversión religiosa en el Estado. El borrador actual del proyecto de ley incluye penas de cárcel de hasta 10 años para quienes sean declarados culpables de convertir a otros por «la fuerza, métodos fraudulentos o matrimonio». Y contempla negar apoyos estatales a quienes se conviertan de una religión a otra.
Los líderes cristianos ven el nuevo proyecto de ley como acto de radicalidad de los hindúes. Y cuestionan la necesidad de la ley, ya que la constitución de la India otorga el derecho a todos a «propagar la religión». Además, no existe una ley nacional que impida o castigue la conversión religiosa. «Una vez que se apruebe el proyecto de ley habrá más persecución y más dificultades», señaló Peter Machado, arzobispo de Bangalore, a la BBC.
El pastor Somu Avaradhi encontró un domingo del pasado octubre en el templo de Hubballi, Estado de Karnataka, a «gente sentada adentro, cantando canciones religiosas hindúes y gritando consignas», declaró a la BBC. Llamó a la policía. Los manifestantes le acusaron de abusar de un hindú y obligarle a convertirse al cristianismo. El pastor fue arrestado bajo cargos de «ultrajar sentimientos religiosos de cualquier clase» y pasó 12 días en prisión antes de ser liberado bajo fianza.
Es una muestra de incidentes no aislados: un informe de la Comunidad Evangélica de la India recabó 39 casos de amenazas o violencia contra cristianos durante este año en Karnataka. El reverendo Vijayesh Lal, secretario general de la comunidad a la que pertenecen 65.000 iglesias en India, señaló que el patrón en Karnataka sigue al de Uttar Pradesh antes de introducirse la ley: «Presionan a la comunidad, presentan acusaciones falsas de conversión y luego introducen una ley que es inconstitucional».
Algunas autoridades nacionales, como el legislador Arvind Bellad del BJP y el ministro principal del Estado, Basvaraj Bommai, cuestionan «por qué solo los cristianos están preocupados por el nuevo proyecto de ley», ya que solo aquellos que intentan atraer a la gente para que se convierta a una religión diferente deben temer a la ley.
El arzobispo Machado asegura que los ataques y el discurso en torno al proyecto de ley están claramente dirigidos a los cristianos. «No es nada bueno lo que el gobierno nos está haciendo».