(ZENIT Noticias / Dublín, 23.05.2024).- El 11 de mayo se celebraron 560 concentraciones públicas para rezar el Rosario en toda Irlanda,organizadas por la Sociedad Irlandesa para la Civilización Cristiana (ISFCC), que promueve entre los católicos el testimonio público de la fe.
Gregory Murphy, coordinador de la campaña comentó que, «desde que esta campaña comenzó en 2010, las concentraciones del Rosario han sido un faro de esperanza para los católicos que perseveran y un faro para los descarriados».
La campaña “Irlanda Necesita a Fátima” propuso este año las concentraciones del Rosario para «pedir a Dios que salve a Irlanda del caos, la inmoralidad y el secularismo actuales».
La ISFCC organiza rosarios a lo largo del año en fechas variadas y como respuesta a sucesos notorios, pero el rosario público anual se celebra el sábado más cercano a la primera aparición de Nuestra Señora de Fátima. Este año «pretendió ser una reparación a Dios por el pecado y una súplica de su ayuda urgente para salvar a Irlanda del continuo auge del satanismo.»
La concentración pública del Rosario se realiza con el canto de himnos marianos, el rezo comunitario del Rosario, las Letanías de la Santísima Virgen María, la oración de consagración de San Maximiliano Kolbe, el rezo de las Alabanzas Divinas y un himno final a la Virgen.
La celebración es coordinada por un «capitán del Rosario» que dirige el acto en cada localidad, con manuales para la celebración, carteles, hojas de intenciones y programas de oración.
La ISFCC entregó a cada concentración del Rosario una pancarta de 2 metros de largo con la consigna: «Como los esfuerzos humanos no consiguen resolver los principales problemas de Irlanda, nos dirigimos a Dios, a través de su Santa Madre, pidiéndole ayuda urgente».
Murphy manifestó que es fácil hallar a voluntarios dispuestos. Se han inscrito en toda Irlanda 545 capitanes del Rosario en pocos días. También observó las ventajas de celebrar las concentraciones del Rosario en público: ante el descenso de católicos practicantes en Irlanda, un rosario público «es una forma estupenda de llegar a los católicos no practicantes. Si te ven rezar en un lugar público, puede que se sientan movidos a ser mejores católicos».
Gracias por leer nuestros contenidos. Si deseas recibir el mail diario con las noticias de ZENIT puedes suscribirte gratuitamente a través deeste enlace.