Foto: C-Fam

Oficina de la ONU propone etiquetar las muertes relacionadas con el aborto como feminicidios

El aborto selectivo por sexo suele incluirse en las definiciones de feminicidio porque implica el asesinato intencional de niñas no nacidas específicamente por ser mujeres. Sin embargo, la idea de incluir las muertes de mujeres debido a complicaciones del aborto es más novedosa y controvertida.

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Rebecca Oas

(ZENIT Noticias – Center for Family and Human Rights / Washington, 13.01.2025).- Mientras la ONU lleva a cabo una campaña de dieciséis días contra la “violencia de género”, su oficina regional para Europa Occidental propuso una definición de “femicidio”, históricamente entendido como el asesinato intencional de mujeres, generalmente por hombres, que incluya las muertes relacionadas con el “aborto inseguro”.

El término “femicidio” data de 1976 y fue acuñado por la activista feminista Diana Russell, pero como señala la oficina de la ONU en Europa Occidental, el concepto se ha “vuelto cada vez más complejo” desde entonces, lo que ha llevado a “una falta de estandarización” y a “definiciones inconsistentes en las distintas regiones y países”.

En 2012, la Organización Mundial de la Salud (OMS) escribió que el feminicidio “en general se entiende como el asesinato intencional de mujeres” y que esta definición “se utiliza comúnmente en políticas, leyes e investigaciones”. Sin embargo, señala que algunas “definiciones más amplias incluyen cualquier asesinato de mujeres o niñas”.

El aborto selectivo por sexo suele incluirse en las definiciones de feminicidio porque implica el asesinato intencional de niñas no nacidas específicamente por ser mujeres. Sin embargo, la idea de incluir las muertes de mujeres debido a complicaciones del aborto es más novedosa y controvertida.

En 2017, el Instituto Europeo de Igualdad de Género realizó un estudio sobre las definiciones de violación, feminicidio y violencia de pareja en toda Europa. Observó que varios países europeos definen las muertes resultantes de la mutilación genital femenina o el aborto “inseguro” como delitos separados, pero ninguno de ellos incluye estas muertes dentro de la definición de feminicidio. La única fuente consultada que propuso su inclusión fue la entonces Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre las causas y las consecuencias de la violencia contra las mujeres y las niñas, Rashida Manjoo.

En su informe de 2012 a la Asamblea General de las Naciones Unidas, Manjoo escribió sobre los “asesinatos relacionados con el género”, también conocidos como feminicidios, y propuso que las “muertes debidas a abortos mal realizados o clandestinos” son una categoría indirecta de esos asesinatos. También se incluyen la mortalidad materna y las muertes relacionadas con el crimen organizado, el tráfico de drogas y la trata de personas.

Si bien la inclusión de las muertes por causas indirectas corre el riesgo de diluir el concepto de femicidio y desviar la atención de los perpetradores que asesinan intencionalmente a mujeres, también ofrece a los activistas del aborto una nueva forma de presionar a los países para que cambien sus leyes. Los organizadores de la campaña 16 Días contra la violencia de género publicaron una hoja informativa en 2022 sobre “femicidio debido a abortos inseguros”. En ella, no mencionan el enjuiciamiento de los abortistas que causan la muerte o lesiones a las mujeres. En cambio, argumentan que las restricciones al aborto obligan a las mujeres a buscar abortos de formas riesgosas, causando muertes, acusando efectivamente a los países con leyes pro vida del delito de femicidio. La base completa de su afirmación de que las muertes de mujeres relacionadas con el aborto son una forma de femicidio es el informe de Manjoo de 2012.

La OMS, citada también en la hoja informativa, ha definido los abortos “inseguros” como “la interrupción del embarazo por parte de personas que carecen de las habilidades necesarias o en un entorno en el que no se cumplen los estándares médicos mínimos, o ambas cosas”. Dado que la OMS publica estándares médicos, incluidos los relativos al aborto, esto significa que la definición puede adaptarse de acuerdo con la agenda proabortista de larga data de la OMS.

Es importante destacar que la OMS no define todos los abortos ilegales como “inseguros”, siempre que se realicen de acuerdo con las normas cada vez más laxas de la OMS, incluidos los abortos autoinducidos con píldoras. En consecuencia, la hoja informativa de 16 días sobre “femicidio debido a abortos inseguros” incluye entre sus “prácticas prometedoras” el grupo Women on Waves, que envía barcos abortistas a países con leyes pro vida, y su proyecto de enviar drones que transportan píldoras abortivas a países donde es ilegal.

Los países miembros de las Naciones Unidas que buscan proteger a las mujeres de la violencia intencional y el asesinato pueden volverse cada vez más escépticos respecto del término “femicidio” si los defensores del aborto logran secuestrar con éxito su definición.

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Redacción Zenit

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