Cáritas Europa ha mostrado este martes su pesar “por lo difícil que es para los Estados miembros encontrar una respuesta eficaz común a los flujos migratorios” y a “la actual crisis humana que se vive en el mar Mediterráneo”.
En un comunicado, la organización ha denunciado que esta situación “está tomando a los migrantes y refugiados –mujeres, niños y hombres vulnerables– como rehenes y haciéndolos objeto de mayor victimismo”. “La migración no es un crimen”, ha advertido. Por el contrario, “salir de cualquier país y buscar protección internacional son derechos humanos reconocidos por la legislación internacional”, ha añadido.
En este sentido, Cáritas Europa ha reiterado “la necesidad urgente de que la Comisión Europea arbitre canales seguros y legales para que los migrantes y refugiados puedan entrar en la UE”.
La organización, que ha estado pidiendo esta solución durante años, ha expresado su “esperanza de que el Consejo Europeo de Justicia e Interior responda positivamente a esta grave situación”.
La crisis migratoria en el Mediterráneo es actualmente uno de los principales retos de la Unión Europea. Por ese motivo, el Consejo Europeo de Justicia e Interior se ha reunido ayer para discutir la Agenda de Migración de la UE y hacer un seguimiento de la reunión extraordinaria del Consejo del pasado 23 de abril que intentó establecer una nueva visión estratégica para las políticas de migración. La reunión de ministros en Luxemburgo no ha logrado acuerdos concretos, pero ha rebajado la tensión con que se inició el mismo. Los responsables del Interior han dejado la última palabra a los jefes de Estado y de Gobierno, que se reunirán la próxima semana.