Miles de jóvenes, unos 90 mil scouts de Italia, con su uniforme azul, pañuelo y sombrero confluyeron a pié desde las primeras horas de la mañana hacia la Plaza de San Pedro en el Vaticano, donde el papa Francisco les recibió hacia el final de la mañana.
Los cantos y sobre todo la alegría y la emoción se manifestaron con fuerza cuando el Santo Padre ingresó en la plaza, y sobre el jeep pasó entre los corredores, saludando con el cariño que le caracteriza.
Los presidentes del comité nacional, Matteo Spano y Angela Laforgia le dijeron en sus palabras: «Hemos venido a Roma con el bastón y la bolsa del peregrino, hemos venido llenos de alegría a encontrar a nuestro Papa, deseosos de ofrecernos para volver bella a nuestra Iglesia».
El papa Francisco se dirigió a ellos, integrantes de la Asociación de Guías y Scouts Católicos de Italia, a todos: Jefes, asistentes eclesiásticos, lobatos, exploradores y los demás grados a quienes les dijo que son “una parte preciosa de la Iglesia”, que “ofrecen una contribución importante a las familias por su misión educativa a los niños, muchachos y jóvenes”, a quienes sus papás les confían porque “están convencidos de su bondad, de la sabiduría del método scout, basado en grandes valores humanos, en el contacto con la naturaleza, en la religiosidad y fe en Dios, un método que educa a la libertad en la responsabilidad”.
Y les preguntó ¿Se acuerdan el año pasado cuando estaban reunidos en el bosque de ‘San Rossore’ y les llamé por teléfono? Francisco quiso elogiar la ‘route’ nacional que habían hecho, así como la ‘Carta del Coraje’ que “expresa vuestras convicciones y aspiraciones” y que además contiene “un fuerte llamado a la educación y escucha, dirigida a vuestras comunidades, parroquias y a la Iglesia en su conjunto”.
Recordó también que cuando alguno pidió al fundador de los Scouts, Lord Baden Powell ‘¿Qué tiene que ver la religión con el movimiento scout?’, Powell respondió que ‘la religión no tiene necesidad de entrar el movimiento, porque está ya dentro. No hay un aspecto religioso del movimiento scout… Todo él está basado en la religión, o sea en tomar conciencia de Dios y de su servicio’.
Así a los miles de presentes les confió que hay algo que le toca el corazón: “Asociaciones como la vuestra son una riqueza para la Iglesia, que el Espíritu Santo suscita para evangelizar a todos los ambientes y sectores”. Si bien precisó que dicho apostolado puede cumplir su misión “si los grupos particulares no tienen contacto con la parroquia de lugar donde tienen sede”, porque en muchos casos no la frecuentan porque provienen de otras zonas.
Les invitó además a integrarse en la pastoral de la Iglesia particular, estableciendo relaciones de estima y colaboración a todo nivel con los obispos, párrocos y los otros sacerdotes, con los educadores y miembros de las otras asociaciones eclesiales presentes en la parroquia” y al mismo tiempo “no contentarse con una presencia decorativa el domingo o en las grandes circunstancias”. Y constató que ya muchos grupos están plenamente integrados en su realidad diocesana y parroquial.
Y también les invitó ha crear puentes, a dialogar, en una sociedad que tiende a levantar muros.
“Les acompaño con mi oración –concluyó Francisco, y añadió– pero les pido que recen por mi. ¡Buen camino a todos!