El papa Francisco presidirá la oración del Rosario que será el acto conclusivo del mes dedicado a la Virgen. Tendrá lugar el viernes 31 a las 8 de la tarde en la plaza de San Pedro.
La oración mariana estará acompañada por una imagen de la Virgen que atravesará la plaza en procesión. El santo padre concluirá la oración con una meditación y con la bendición apostólica. Será una celebración abierta sin necesidad de solicitar entrada para el ingreso. Así lo ha comunicado la Santa Sede, en una carta firmada por el cardenal Angelo Comastri, vicario general de su santidad por la Ciudad del Vaticano.
Como recuerda Comastri en la carta, el papa Francisco al finalizar el Rosario en la basílica de Santa María la Mayor el día 4 de mayo, dijo «la Virgen nos educa en la verdadera libertad, nos ayuda a salir de la adolescencia del espíritu para ser adultos en la fe y capaces de elecciones grandes, valientes y definitivas».