(ZENIT – Roma).- El Año Jubilar con motivo del centenario de las apariciones de Nuestra Señora de Fátima, inició el domingo pasado en el santuario mariano portugués, con una procesión que atravesó la Puerta Jubilar construida para esta ocasión. El lema del jubileo es: “Mi Inmaculado Corazón será tu refugio y el camino que te conducirá hasta Dios”.
Las apariciones de María en Fátima a los tres pastorcitos, Lucía, Jacinta y Francisco, iniciaron el 13 de mayo de 1917 . A ellos Nuestra Señora les dio un mensaje compuesto de tres partes que concluye con la promesa del triunfo de su Inmaculado Corazón.
La misa en el santuario mariano estuvo presidida por el obispo Antonio Marto, quien señaló que la preparación para la Navidad, el tiempo de Adviento, «no se limita a la memoria romántica de un acontecimiento lejano en el pasado como el nacimiento del Niño Jesús», sino que indica «la venida de Dios a nuestras vidas”.
Y lo relacionó con el mensaje de la Virgen en Fátima, que invita a la conversión, recordando que “el milagro más importante de Fátima no es la danza del sol, sino la conversión del corazón”.
El obispo de Fátima-Leiría invitó así a vivir el año jubilar que se ha abierto con «alegría y esperanza, como momento favorable de acción de gracias por el don de la visita y del mensaje de Nuestra Señora”, y a sentir “la experiencia de ternura y misericordia de Dios; de devoción al Inmaculado Corazón de María; de conversión y compromiso con Dios a favor del prójimo y por la paz en el mundo, siguiendo el ejemplo de los tres pastorcitos».
“Atravesar la puerta del Jubileo es el signo externo de que entramos en peregrinación interior y nos dejamos guiar por la Virgen que es madre y sabe cómo guiarnos hacia Dios. Dejemos, por tanto, guiados por ella en este tiempo de perturbación y esperanza, dijo”.
La celebración en la basílica de la Santa Trinidad terminó con la bendición papal dada por el obispo Antonio Marto, Obispo de Leiria – Fátima, por mandato de Francisco.
Este año, para celebrar el 100 aniversario de las apariciones de Fátima se le concedió al santuario un año jubilar que inició este pasado 27 de noviembre hasta el 26 de noviembre de de 2017, en el cual obtendrán indulgencia plenaria “los fieles vengan en peregrinación al Santuario de Fátima en Portugal y que allí participen en una celebración u oración dedicada a la Virgen”.
Otra posibilidad para obtener la indulgencia: “Los fieles piadosos que visitan con devoción una imagen de Nuestra Señora de Fátima expuesta solemnemente a la veneración pública en cualquier templo, oratorio o local adecuado en los días de los aniversarios de las apariciones, el 13 de cada mes desde mayo hasta octubre (de 2017), y participen allí devotamente en alguna celebración u oración en honor de la Virgen María”, esto en cualquier parte del mundo”.
La tercera forma es para las personas que por la edad, enfermedad u otra causa grave no puedan desplazarse. Ellos pueden rezar ante una imagen de la Virgen de Fátima y deben unirse espiritualmente en las celebraciones jubilares en los días de las apariciones, los días 13 de cada mes, entre mayo y octubre de 2017. En todos los casos deben rezar el Padrenuestro, recitar el Credo e invocar a la Madre de Dios.
Leer el mensaje de Fátima
La procesión de la imagen de María pasa por el portal, abriendo el año jubilar
El Santuario de Fátima abre el Año Jubilar por el centenario de las apariciones
El Papa concedió también indulgencia plenaria a quien visite el santuario o rece ante la imagen de Fátima en su país