ROMA, miércoles 25 de noviembre de 2009 (ZENIT.org).- El cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, presidente de Caritas Internationalis, pidió una acción inmediata para prevenir la muerte de los niños afectados con el VIH en los países pobres.

Hablando sobre el tema de la próxima Jornada Mundial de la Lucha contra el sida, el 1 de diciembre, “Acceso universal a los derechos humanos”, el cardenal afirmó que permitir a los niños seropositivos crecer y convertirse en adultos es un derecho humano fundamental.

Según un comunicado de Caritas recibido por ZENIT, actualmente, la mitad de los niños afectados por el VIH muere antes de haber cumplido los dos años porque vive en países pobres en los que el acceso a los tratamientos adecuados es muy limitado.

“Para muchos, la promesa del acceso universal llega demasiado tarde”, confesó el cardenal Rodríguez Maradiaga.

“Demasiado tarde para personas como una madre de Sudáfrica cuyo hijo murió sobre sus hombros mientras lo llevaba al hospital -continuó-. Tenía una enfermedad relacionada con el sida, como sus dos hermanitas, también fallecidas”.

“La madre está recibiendo ayuda de Caritas, pero afronta el dolor cotidiano de haber perdido a tres hijos que nunca tuvieron el acceso a tratamientos adecuados contra el sida”, añadió.

“Para otros millones de personas no es demasiado tarde, si nos decidimos a actuar ahora”, declaró.

El presidente de Caritas recordó que la organización trabaja en todo el mundo en comunidades en las que el VIH está “devastando las familias”.

“Exhortamos a los Gobiernos, las empresas farmacéuticas y la comunidad internacional a garantizar que los niños tengan el acceso oportuno a los tratamientos del VIH y de la tuberculosis”, añadió.

Para lograr este objetivo, Caritas Internationalis ha lanzado este año la campaña "HAART for Children".

“Ninguna madre y ningún padre debe ver impotente morir a su propio hijo -afirmó el cardenal-. Ningún niño debe sufrir por haber nacido en un país en el que hay una elevada tasa de sida y un sistema sanitario pobre”.

“El acceso universal no se refiere a la geografía sino a la humanidad”, afirmó el cardenal, “quiere decir reducir el sufrimiento y salvar vidas; es permitir a los niños crecer”.

Actualmente hay dos millones de niños menores de 15 años con VIH. Además unos 15 millones de niños menores de 18 años han perdido uno o los dos padres por enfermedades relacionadas con el sida.

Caritas, que promueve también esfuerzos para prevenir la transmisión del VIH de madre a hijo, gestiona programas contra el sida en más de cien países y está comprometida en la lucha contra la pandemia desde hace más de veinte años.

Según el informe 2009 sobre el sida realizado por el Programa Conjunto para combatir el sida de Naciones Unidas y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) UNAIDS, recuerda Radio Vaticano, el número de personas que han contraído el VIH desde el año 2001 al año 2009 ha disminuido un 17%.

El número de nuevas infecciones registradas ha descendido un 15% en el África subsahariana, un 25% en Asia oriental y un 10% en el sur y el sudeste asiático.

Al mismo tiempo, se ha prolongado la esperanza de vida de los enfermos gracias a las medicinas antirretrovirales, que han permitido un descenso de la tasa de mortalidad del 10% en los últimos cinco años.

Estos fármacos son también los que permiten la disminución de la transmisión del virus entre madre y neonato.

Según las estadísticas, unos 33 millones de personas están afectadas por el VIH en el mundo actualmente.