El santo padre se ha dirigido esta mañana por sorpresa a la zona industrial de la Ciudad del Vaticano. Francisco ha saludado a los trabajadores de la carpintería y de la central eléctrica vaticana, los herreros y el laboratorio hidráulico. La alegría ha podido sentirse cuando caminando en la zona han visto al papa de cerca y han podido saludarlo.

En una entrevista a Alessandro De Gregori ha contado en Radio Vaticana que estaban hablando entre los compañeros en el reparto y han visto llegar un coche, un C1. La han mirado y se han  dicho "¿cómo es posible? Parece el papa... Efectivamente, era el santo padre junto a Mariotti", cuenta De Gregori. Ha añadido además que "en unos 10 años que trabajo no me había sucedido nunca. Ha sido una emoción encontrarlo de nuevo, porque como casi todos nosotros ya hemos visto al papa en una de las misas de la mañana. Ha sido realmente una bonita sorpresa".

Así mismo señala que le ha gustado mucho que "el ha venido a encontrarnos y no al contrario". También cuanta que el papa se ha detenido con ellos unos cinco minutos. "Con razón, los departamentos para visitar son muchos. Nos ha preguntado por nuestro puesto de trabajo y de qué nos ocupamos".