El tema de la teología de la liberación entró hoy de lleno en el debate del 'Meeting de Rimini para la Amistad entre los Pueblos'. Fue en durante la conferencia realizada ante un auditorio de unas diez mil personas, por el 'cura antidrogas' de la Villa 21 de Buenos Aires, el padre 'Pepe' Di Paola; por el profesor Guzmán Carriquiry, secretario de la Pontificia Comisión de América Latina; y por el sacerdote Stefano Alberto, docente de Teología en la Universidad del 'Sacro Cuore' de Milán, sobre el tema “El papa Francisco con la Lumen Fidei, en las periferias de la existencia”.

El párroco de la Villa 21, indicó en que “en la encíclica 'Lumen Fidei' se habla de fe como encuentro y lo hemos podido practicar en diversos aspectos concretos del encuentro entre Dios y los hombres”: a través del trabajo realizado en los barrios marginados, de la integración de sus habitantes, al conseguir servicios hídricos y sanitarios que les permitan vivir con dignidad, bautizando y confirmando a tantos que por motivos burocráticos no habían podido hacerlo. Favoreciendo también la devoción popular que dichos habitantes traían de sus países limítrofes.

Incluso sufriendo amenazas de los traficantes que aprovechando la ausencia del Estado usaban esas villas para vender droga, lo que al padre 'Pepe' le valió serias amenazas. El sacerdote indicó que durante toda esta labor contaron con el apoyo del entonces obispo de Buenos Aires, Jorge María Bergoglio.

(ver texto de la conferencia)

Cuando el padre 'Pepe' concluyó su exposición, el periodista Alver Metalli que moderaba la conferencia le preguntó sobre una pregunta recurrente enre los periodistas: la relación que tuvieron con la teología de la liberación.

El joven sacerdote recordó que el desafío quizás más relevante fue “de prevención y recuperación en la que nos empeñamos en nuestros barrios, con una especie de trabajo a la Don Bosco”. Y que “la conclusión de nuestra experiencia es: la fe del pueblo es transformadora y la única fuerza genuina”.

Por ello indicó que “quienes dijeron que la religión es el opio de los pueblos al ver hoy la realidad de las villas, deberían cambiar de opinión”. Porque “el poder de transformación hizo posible que estos barrios hoy tengan un progreso más grande del que podíamos imaginar. “Y esto nace de un empeño y no de una ideología que separa y divide”.

“Nos sentimos herederos -consideró el padre Di Paola- de los sacerdotes que crearon estos grupos de religiosos que operan en las villas y que eran parte de los sacerdotes del tercer mundo”.

Puntualizó entretanto que en “Argentina tenemos dos personas muy importantes con quienes nos formamos en la teología del pueblo: los padres Lucio Gera y Rafael Tello”.

Dijo también que “de la teología de la liberación, hemos tomado elementos correlatos con poner al pobre en un lugar privilegiado” si bien precisó, “nunca insertamos ningún análisis extraño fuera del evangelio”. (ver video)