Según han revelado este viernes fuentes de las «Catholic Charities», las Cáritas diocesanas estadounidenses, estas instituciones ya «están respondiendo a las inmediatas necesidades de los refugiados y planificando procedimientos para la recuperación a largo plazo».
Además de las ayudas de emergencia, las Catholic Charities ofrecen a largo plazo «alojamiento temporal o permanente, asistencia psicológica», «consulta para encontrar trabajo y asistencia médica o prescripción de medicinas».
Los Catholic Community Services de Baton Rouge han formado, además, en algunas parroquias a voluntarios que ofrecerán asistencia de emergencia a necesitados.
En Nueva Orleans, las Catholic Charities han tenido que ser evacuadas. El equipo se ha trasladado a las oficinas de la los Catholic Community Services de Baton Rouge para coordinar la labor de ayuda y reconstrucción.
Las agencias de las Catholic Charities de Florida se trasladarán en la próxima semana a Misisipi y Luisiana para ofrecer «asistencia técnica en primera línea».
Las Catholic Charities de Memphis, por su parte, están asistiendo a miles de refugiados que ya han llegado a la ciudad. «Actualmente la agencia está ofreciendo alojamiento en sus instalaciones a familias para que puedan quedarse mientras lo necesiten».
Como afirma el comunicado, el objetivo de las Catholic Charities de los Estados Unidos es «ofrecer ayuda, crear esperanza».