BLUMENAU, lunes, 5 septiembre 2005 (ZENIT.org).- Un sacerdote italiano, el padre Beppe Bessone, fue asesinado en la noche del 2 de septiembre en Blumenau, ciudad del Estado de Santa Catarina, en el sur de Brasil.
Ha sido este lunes cuando la agencia del mundo misionero «Misna» ha confirmado la muerte del sacerdote «fidei donum» –enviados por sus diócesis a otros países donde hay escasez de sacerdotes– de Pinerolo (Piamonte).
El padre Bessone, de 62 años, perdió la vida en su propia casa durante –aparentemente— un intento de robo.
Así lo apuntó a la agencia misionera el padre Ferdinando Lanfranchini, párroco de Santa Maria Asunta, la iglesia de Bricherasio a la que pertenecía el sacerdote asesinado y que éste había dejado la semana pasada para regresar a Brasil, donde era misionero desde 1975.
La noticia del crimen la dieron al padre Lanfranchini los otros cuatro sacerdotes «fidei donum» piamonteses presentes en el lugar.
Comentando el asesinato, lamentó el párroco de Bricherasio: «Para robarle un poco de dinero que podía tener han desperdiciado la vida de una persona estupenda».
En su parroquia había pasado el padre Bessone los últimos dos meses de vacaciones después de tres años de presencia ininterrumpida en Brasil.
Fuentes de la diócesis de Pinerolo refieren que el asaltante habría sido ya arrestado, si bien su identidad no ha trascendido.
El domingo se celebró en Blumenau una misa en sufragio por el alma del sacerdote asesinado, cuyos restos llegarán a Italia en el curso de la semana.
