KÖNIGSTEIN (ALEMANIA), jueves, 29 marzo 2006 (ZENIT.org).- «La Iglesia necesita cristianos en Oriente Medio. Por ello, nuestra primera prioridad es poner fin a la emigración de cristianos de esta región», ha explicado monseñor Jean-Clément Jeanbart, arzobispo melquita de Alepo, en su visita del 29 de marzo a Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN).
Insistiendo en la necesidad de formación y empleo, el prelado añadió: «Debemos hacer todo lo que esté en nuestra mano para animar a los cristianos a permanecer en el país. En la actualidad, representan a un 10 por ciento de la población siria (17 millones de habitantes) y son auténticos testigos de Cristo y el Evangelio».
Según el arzobispo Jeanbart, la Iglesia siria también sufre a causa del fundamentalismo y la violencia islamistas: «Es por ello que el diálogo, tanto interreligioso como ecuménico, es tan necesario. Ahora estoy planificando la creación de un centro para el diálogo y la reconciliación en mi archidiócesis».