Tras considerar que «se trata de un tiempo de gracia para toda Cáritas Argentina, más allá de mi persona», invitó a «transitar juntos esta nueva etapa» y a sumarse por «partida doble».
«En primer lugar, a través de la oración. En segundo lugar, renovando ese sabernos parte integrante de este maravilloso “continente de la esperanza”, para acrecentar nuestra sensibilidad interior, para fortalecer nuestra solidaridad con otras situaciones de pobreza, similares o mayores que las que afrontamos en nuestro país, y que siguen condicionando el derecho a una vida digna de tantos pueblos de la región», explica en el editorial del boletín «Huellas de Esperanza».
Monseñor Bargalló estima que «el Señor nos está invitando a vivir de manera muy intensa y comprometida este tiempo, extendiendo la mirada para ver más allá de nuestras propias fronteras», y recuerda que «uno de nuestros objetivos comunes en Cáritas es alcanzar una mayor equidad y, para lograrla, es necesario reconocer, visualizar e indagar acerca de las causas que provocan la pobreza y la exclusión».
«Esto nos lleva a abordar un desafío permanente: observar los signos de los tiempos desde una mirada evangélica, porque es a través de esos signos que Dios nos va hablando y nos va reclamando nuestra respuesta de discípulos», concluye.