La catedral de México seguirá cerrada hasta que no se garantice la libertad de culto
MÉXICO, miércoles, 21 noviembre 2007 (ZENIT.org–El Observador).- La catedral metropolitana de la Ciudad de México permanecerá cerrada hasta que no exista un acuerdo por escrito, por parte del gobierno del Distrito Federal, en el que éste se comprometa a hacer respetar la libertad de culto, consagrada por la Constitución mexicana.
Así lo dio a conocer el apoderado legal del inmueble y presidente del Colegio de Abogados Católicos, Armando Martínez Gómez, tras sostener una reunión con autoridades del Gobierno del Distrito Federal.
El pasado domingo, cerca de 200 personas irrumpieron de manera violenta en la catedral, cuando se celebraba misa del mediodía, con el pretexto de que el repique de campanas para la llamada a misa había sido una provocación contra del líder de izquierda Andrés Manuel López Obrador, quien celebraba un mitin en la plaza aledaña.
El acto de vandalismo motivó que el apoderado legal junto con los sacerdotes que atienden la catedral, decidieran cerrar el templo y exigir una investigación para deslindar responsabilidades y que se castigue a los culpables de la artera agresión a los fieles y a los sacerdotes celebrantes.
El gobierno de la capital ha tratado, por todos los medios, de atemperar la situación, exigiendo la reapertura del templo sede del arzobispo primado de México, sin embargo no se hará posible esta reapertura hasta que haya un acuerdo que garantice la libertad de culto.
