CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 21 noviembre 2007 (ZENIT.org).- Benedicto XVI ha lanzado un llamamiento al final de la violencia en Somalia y ha pedido encontrar soluciones pacíficas al conflicto interno.
Su exhortación fue escuchada este miércoles por más de 15 mil peregrinos que participaron en la audiencia general, celebrada en la plaza de San Pedro del Vaticano.
«Llegan noticias dolorosas sobre la precaria situación humanitaria de Somalia, especialmente en Mogadiscio, cada vez más afligida por la inseguridad social y por la pobreza», afirmó.
«Sigo con trepidación –confesó el obispo de Roma– la evolución de los acontecimientos y hago un llamamiento a los responsables políticos, tanto a nivel local como internacional, para que se encuentren soluciones pacíficas y se aporte consuelo a aquella querida población».
El Papa animó «los esfuerzos de cuantos, a pesar de la inseguridad y las incomodidades, permanecen en aquella región para ayudar y confortar a los habitantes».
La edición en italiano del 21 de noviembre de «L’Osservatore Romano» denunciaba: «El drama de la capital somalí se agudiza cada vez más: más de 150 mil civiles han escapado en el último mes y la crisis humanitaria es espantosa».
«Para afrontar el desastre, UNICEF ha anunciado al distribución de ayudas de emergencia a más de 100 mil desplazados», informaba el diario vaticano.
El conflicto enfrenta a tropas etíopes y milicianos antigubernamentales. El país no tiene un gobierno estable desde 1991, cuando estalló la guerra civil.
El diario de la Santa Sede, que en los últimos días está siguiendo de cerca la situación, denunció la edición del 29-30 de octubre la penetración de fundamentalistas ligados a la organización terrorista Al Qaeda.
