CIUDAD DEL VATICANOI, viernes, 8 febrero 2008 (ZENIT.org).- Benedicto XVI ha manifestado su pésame por el fallecimiento de frey Andrew Bertie, a los 79 años de edad, 78º gran maestre de la Soberana Orden Militar de Malta, acaecida el 7 de febrero.
El Papa transmite sus sentimientos en un telegrama enviado este viernes al lugarteniente de la Orden, frey Giacomo Dalla Torre del Tempio di Sanguinetto, superior en funciones hasta que sea elegido un nuevo gran maestre.
En el mensaje, el Papa alaba «la obra de este hombre de cultura y su compromiso generoso en el cumplimiento de su elevado encargo, en especial a favor de los más necesitados, así como su amor a la Iglesia y su testimonio luminoso de los principios evangélicos».
Andrew Willoughby Ninian Bertie fue el primer ciudadano inglés en ser elegido al puesto de gran maestre en los 900 años de historia de la Orden.
Nacido el 15 de mayo de 1929, se instruyó en el Ampleforth College, la Christ Church Oxford y la Escuela de Estudios Orientales y Africanos de la Universidad de Londres.
Tras realizar el servicio militar en la Guardia Escocesa, trabajó como periodista financiero en la City de Londres antes de asumir el puesto de catedrático de Lenguas Modernas (francés y español) en la Worth School, en Sussex.
Admitido en la Orden en 1956, tomó votos religiosos solemnes en 1981 y sirvió en el Consejo Soberano (gobierno de la Orden) durante los siguientes siete años, antes de ser elegido gran maestre el 8 de abril de 1988.
«Su alteza frey Andrew Bertie, que hablaba con fluidez cinco idiomas, supervisó numerosos cambios en la Orden de Malta, instaurando una visión moderna en los programas humanitarios de la Orden, aumentando el número de miembros y ampliando las posibilidades de ayuda a los pobres y los necesitados de regiones remotas», constata un comunicado emitido por la orden.
«Aumentó de 49 a 100 el número de misiones diplomáticas bilaterales de la Orden, cuyo delicado mandato es ofrecer asistencia a países afligidos por desastres naturales o conflictos civiles», afirmó.
La Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta, más conocida como la Soberana Orden de Malta, tiene un carácter doble: es una de las más antiguas órdenes religiosas católicas, siendo fundada en Jerusalén alrededor del año 1048 (celebró el noveno centenario de su fundación oficial en 1999); al mismo tiempo, siempre ha sido reconocida por las naciones como un ente independiente de Derecho Internacional.
«Organizó conferencias internacionales en las que los miembros pudieran contribuir a las estrategias humanitarias de la Orden, y fomentó un mayor compromiso con la vertiente espiritual de la misión de la Orden –explica la institución–: auxiliar a pobres y enfermos, y ofrecer un modelo de vida de conformidad con los principios cristianos. Por otra parte, modernizó la estructura interna y la administración de la Orden».
«Hombre reflexivo y de variados intereses, con el carácter algo reservado propio de los británicos, frey Andrew era una persona altamente estimada por todos los que tuvieron la ocasión de trabajar con él en sus muchos proyectos», cuentan sus hermanos en religión.
Recibió el Premio «Sendero para la Paz» («Path to Peace») 2005 que entrega la Fundación del mismo nombre de la Misión de la Santa Sede ante las Naciones Unidas.
Entre los doctorados honoris causa que se le atribuyeron se encuentra el de Medicina y Cirugía de la Universidad de Bolonia (1992); Jurisprudencia de la Universidad de Malta (1993); Humanidades de la Universidad de Santo Domingo (1995), Universidad Católica Boliviana San Pablo, Bolivia (2002); y Derecho en la Universidad St. John’s, Minnesota (2003).
La misión de la Orden está definida en su lema «Tuitio Fidei et Obsequium Pauperum», la defensa de la Fe y el servicio a los pobres.
La Orden dirige numerosos hospitales, centros médicos, ambulatorios, estructuras especializadas para responder a emergencias humanitarias en 120 países.
Actualmente está compuesta por 12.500 miembros y por 80.000 voluntarios permanentes, asistidos por 13.000 médicos, enfermeros, y personal sanitario.
La Orden tuvo que convertirse en militar para proteger a los peregrinos y a los enfermos y para defender los territorios cristianos en Tierra Santa. Después de la pérdida de Malta (1798) la Orden dejó de ejercer esta función.
Más información en http://www.orderofmalta.org