BARCELONA, domingo, 10 febrero 2008 (ZENIT.org).- Los obispos catalanes manifiestan su preocupación por el proyecto de ley de la Generalitat de Cataluña sobre los centros de culto o de reunión con fines religiosos, porque pretende regular el ejercicio de un derecho fundamental muy importante, el de la libertad religiosa.
Este proyecto de ley podría afectar a iglesias, centros parroquiales y otros edificios de las diócesis catalanas.
Para los obispos, reunidos en plenaria, esta ley debe tratarse con atención porque se refiere «a realidades y situaciones muy diferentes entre ellas, dada la distinta naturaleza y finalidades que tienen los centros de culto o de reunión en las diferentes religiones».
Con esto hacen una referencia implícita a la diferencia entre centros de culto católicos y de otras religiones o agrupaciones religiosas como por ejemplo la construcción de mezquitas.
El mencionado proyecto tendría que explicitar las condiciones técnicas en base a las cuales los ayuntamientos otorgarán la pretendida nueva licencia municipal de actividades de uso de centros de culto o de reunión con fines religiosos. Los obispos consideran que «la posible ley no ha de tener efectos retroactivos en ningún caso».
En un comunicado mandado a Zenit, los prelados indican también su preocupación sobre la enseñanza de la religión en la escuela.
Los obispos han estudiado el hecho que en el proyecto de Decreto sobre el Bachillerato, la Religión queda fuera del horario lectivo y han sido informados de las diferentes gestiones que se están haciendo con el Departamento de Educación de la Generalitat para «encontrar una solución satisfactoria».
También recuerdan que, en todas las leyes orgánicas de educación y también en la LOE, la Ley Orgánica de Educación, la Religión Católica –que desde hace más de treinta años no es obligatoria, sino de libre elección por los padres o los alumnos– «debe ser incluida en condiciones equiparables a las otras materias fundamentales».
Si queda fuera del horario lectivo «no se cumple en absoluto esta condición», advierten. Los obispos confían, por lo tanto, que, en el Decreto definitivo de Bachillerato, la Religión se curse en el horario lectivo, tal y como prescribe la normativa.
Los obispos manifiestan, a su vez, su deseo de continuar colaborando con la Administración «para lograr cada vez más la excelencia y la equidad en la educación en nuestro país, puesto que ayudar a mejorar el sistema educativo es una misión de todas las instituciones».
Con motivo de las próximas elecciones generales, y tras considerar la Nota de la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Española del día 30 de enero de 2008, los obispos de Cataluña desean que la mencionada Nota «no sea interpretada como una limitación de la libertad de opción política sino como unos principios orientativos que ayuden al discernimiento moral para que los ciudadanos puedan votar en conciencia».
La Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Española (www.conferenciaepiscopal.es) publicó una nota ante las elecciones generales del 9 de marzo de 2008 en la que como obispos quieren brindar «a los católicos y a todos los que deseen escucharnos algunas consideraciones que estimulen el ejercicio responsable del voto».
