CARACAS, martes, 18 febrero 2008 (ZENIT.org).-El cardenal Jorge Urosa, arzobispo de Caracas, ha pedido el cese de la «escalada de violencia política» que se vive en Venezuela, tras los incidentes registrados en los últimos días en varias regiones del país.
Según recuerda la página web de la arquidiócesis de la capital, la semana se registró un atentado con bomba a la Nunciatura Apostólica en Caracas y la fachada de la sede diplomática fue rayada con graffitis.
Un día antes fue colocado otro explosivo de bajo poder en la estatua del prócer estadounidense George Washington, ubicada en una plaza en el oeste de la capital venezolana.
Igualmente, se registraron intentos de saqueos en la ciudad de Barinas, pueblo natal del presidente Hugo Chávez, y enfrentamientos entre grupos políticos rivales en la alcaldía de San Casimiro, en el centro del país.
«Aquí no está planteado que nos caigamos a golpes entre los venezolanos, aquí está planteado simplemente que siga el juego democrático, que los venezolanos tengamos la capacidad de resolver nuestros asuntos como personas, como hermanos y que no se imponga la fuerza y la impunidad», dijo el cardenal a la emisora «Unión Radio».
Urosa instó a las autoridades a resguardar la sede diplomática de la Santa Sede en Caracas, ya que en la actualidad no tiene protección gubernamental.
El prelado también se refirió a hechos violentos ocurridos en el estado occidental de Lara, donde un grupo de personas arremetió contra una manifestación opositora que recogía firmas a favor de la libertad de expresión en el país y el rechazo ante el posible cierre del canal privado de noticias «Globovisión».
«No podemos ir en una especie de escalada de violencia política eso debe cesar y es el llamado que hago como arzobispo de Caracas a las autoridades», indicó Urosa.
Los venezolanos «debemos entendernos y las autoridades están llamadas a tener una actitud de diálogo y entendimiento y no de que se cree un ambiente de violencia política».
Asimismo, se refirió al conflicto legal que mantiene Exxon-Mobil con la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) e indicó que ese problema debe unir a los venezolanos, sin embargo aclaró que esta situación se tiene que resolver por la vía legal.
El cardenal pronunció sus declaraciones después de que la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) emitiera un comunicado en el que expresa su preocupación por el nuevo atentado a la sede de la Nunciatura Apostólica en Venezuela, y por el brote de violencia política que se está manifestando en varias regiones del país.
