BOGOTÁ, jueves, 21 de agosto de 2008 (ZENIT.org).- La Iglesia en Colombia llevará a cabo en las próximas semanas dos iniciativas de ámbito nacional para promover la paz y la reconciliación en el país, en las que participarán también miembros de la sociedad civil.
Los próximos 25, 26 y 27 de agosto se celebrará, en el Centro de Convenciones Compensar de Bogotá, el IV Congreso Nacional de Reconciliación, convocado por la Conferencia Episcopal de Colombia.
El objetivo del Congreso, que lleva por título «El desarrollo es el nuevo nombre de la paz», es profundizar en la importancia del desarrollo integral de la persona para la consecución de la paz, a la luz de las enseñanzas de la Populorum progressio de Pablo VI, de la que se cumplen 40 años.
En él está previsto que participen, además de los obispos, representantes de Cáritas y ONGs tanto nacionales como internacionales, religiosos y agentes de pastoral social, representantes del Gobierno nacional y local, de universidades y del mundo empresaria, y también miembros de otras confesiones religiosas.
Para preparar este Congreso, se celebraron en los meses de mayo y junio otros diez «precongresos» regionales en todo el país. Los organizadores esperan que este congreso suponga «un evento de reflexión y alto impacto para el país».
«En el Congreso se examinará desde una dimensión integral el concepto del desarrollo y su estado actual en Colombia», y también se presentarán «algunas de las más exitosas experiencias de desarrollo y paz que se están realizando en nuestro país», añaden.
Semana por la Paz
Posteriormente, entre el 7 y el 14 de septiembre, se celebrará la Semana por la Paz 2008, con el lema «Hacia la paz, vida digna, desarrollo y dignidad», impulsado por la Comisión Episcopal de Pastoral Social colombiana.
Esta semana, que se celebra cada año desde 1988, tiene lugar en torno a la celebración el 9 de ese mes del Día Nacional de los Derechos Humanos.
Durante la presentación de la Semana, el pasado 14 de agosto en la sede de la Conferencia Episcopal, monseñor Jaime Prieto Amaya, obispo de Barrancabermeja y Presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, afirmó que el desarrollo «es necesario para una verdadera paz en Colombia».
«La paz y el desarrollo integral no se logran sin el respeto y la articulación de los derechos, entre ellos el más importante el derecho a una vida digna», añadió.
Otro de los intervinientes en la presentación, monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria, director del SNPS/Cáritas Colombiana, explicó que para la consecución de la paz es fundamental «que el estado social de derecho sea el marco para construirla», como también el «acompañamiento a las víctimas de la violencia».
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