MADRID, jueves, 28 mayo 2009 (ZENIT.org).- Un total de 24 proyectos en siete países de América, Asia y África, y una inversión global superior al millón de euros, son algunos de los hitos alcanzados en 2008 por la ONG Haren Alde, perteneciente a la Orden de Agustinos Recoletos, que se recogen en la memoria anual de esta organización solidaria.
Los proyectos están relacionados con el agua potable y las letrinas sanitarias, pero también con la educación y la formación, la ayuda a personas discapacitadas o la mejora de equipamiento hospitalario; casi 2.500 niños han sido apadrinados en once países de América Latina y África, informa a ZENIT la Orden de Agustinos Recoletos.
En 2008, la inversión en proyectos de cooperación al desarrollo superó el millón de euros. Al esfuerzo económico y solidario de los socios y bienhechores de la ONG Haren Alde se han vuelto a sumar distintas administraciones locales y autonómicas. Sin estas aportaciones no hubiera sido posible la financiación de estas iniciativas, que han cubierto necesidades básicas en regiones de siete países de América y África.
La Comunidad de Madrid, el Gobierno de Navarra, el Gobierno de La Rioja, la Generalitat Valenciana, la Comunidad de Castilla y León, la Junta de Comunidades de Castilla La-Mancha; los ayuntamientos de Salamanca, Talavera de la Reina (Toledo), Tudela (Navarra), Zaragoza y Arnedo (La Rioja), y entidades bancarias como Caja Navarra, han sido algunas de las instituciones que se han sumado a las propuestas de la ONG Haren Alde.
Uno de los proyectos más relevantes es el impulsado en Sierra Leona. Denominado «Proyecto Pikines», esta iniciativa pretende eliminar el hambre crónica de la población infantil, la pobreza de su población, los vectores de transmisión de enfermedades graves de la zona, la discriminación y mutilación genital de la mujer y el analfabetismo en Biriwa, mediante la construcción de huertos escolares, escuelas y talleres de formación ocupacional, así como mediante giras educativas por las aldeas.
Los agustinos recoletos trabajan intensamente en esta zona después de reabrir la misión tras la guerra de 2004. Haren Alde está ayudando a paliar el hambre y la mortalidad infantil.
Haren Alde canalizó en 2008 la ayuda para el apadrinamiento de 2.455 niños de once países de América Latina y África, que les ha permitido mejorar su calidad de vida. Son más de dos mil razones para estar satisfechos, porque niños de Brasil, Argentina, Perú, Venezuela, Colombia, Ecuador, Panamá, Guatemala, Sierra Leona, China y Costa Rica han encontrado un sustento indispensable para sus necesidades más básicas.
El pasado 28 de agosto de 2008 se produjo el relevo en la presidencia de la ONG Haren Alde. El padre Manuel Fernández Rodríguez recogió el testigo de Severiano de Cáceres, que tras seis años al frente de la organización, decidió trasladarse a Chota (Perú) para implicarse más de cerca en los proyectos solidarios que la ONG desarrolla en la zona desde su fundación.
El actual presidente de la ONG explica en la carta que abre la memoria, que tiene dos objetivos primordiales: animar a todos los miembros de la familia agustino-recoleta a unir sus fuerzas para cumplir la misión de estar más cerca de los más desfavorecidos y aumentar los recursos necesarios para el desarrollo de nuevos proyectos en los países más desfavorecidos.
La organización no gubernamental Haren Alde nació en Navarra en 1992 de la mano de la Orden Agustinos Recoletos con el único objeto de trabajar en favor de las personas y los pueblos más empobrecidos.
Sus proyectos de cooperación al desarrollo y apadrinamiento son posibles gracias al apoyo económico de organismos oficiales, fundaciones, padrinos y socios bienhechores.
También cuenta con el compromiso solidario de las parroquias y colegios que los agustinos recoletos animan en España y en los 19 países donde tiene presencia la Orden. Haren Alde trabaja con personal voluntario.