LIMA, domingo 6 de septiembre de 2009 (ZENIT.org).- Los presidentes de las conferencias episcopales de Ecuador, Venezuela y Colombia hicieron público este viernes un comunicado conjunto en el que reiteran su llamado a la unidad y el respeto entre sus países.
«Los altos intereses de los ciudadanos de los tres países exigen a sus conductores trabajar con imaginación en pos de los tantos motivos de unidad que afortunadamente poseemos», se afirma en el comunicado suscrito por monseñor Antonio Arregui Yarza, arzobispo de Guayaquil y presidente de la Conferencia Episcopal de Ecuador; monseñor Ubaldo Ramón Santana Sequera, arzobispo de Maracaibo y presidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela; y monseñor Rubén Salazar Gómez, arzobispo de Barranquilla y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC).
El texto invita a los dirigentes, instituciones y ciudadanos a tener «una amplitud de miras que trascienda los nacionalismos estrechos y se abra a la fraternidad sin fronteras que soñaron los próceres comunes que dieron su vida por la libertad».
Monseñor Salazar Gómez explicó que la reunión de los presidentes de estos tres episcopados busca contribuir a crear un «sentimiento y una mentalidad de oración, cooperación y fraternidad».
El presidente de la CEC aclaró que el encuentro realizado en Bogotá en la sede del Episcopado, no ha sido algo coyuntural o debido a las relaciones difíciles entre los países, sino que se venía planeando desde el año 2008.
Sobre la marcha convocada en varias ciudades como protesta a las declaraciones del presidente Hugo Chávez contra Colombia, monseñor Salazar Gómez aseguró que «tenemos derecho a expresarnos, a manifestar lo que sentimos y pensamos».
Sin embargo precisó que el límite de esta expresión son «los derechos de los demás. Hay que ser respetuosos de los demás. Mis propios derechos no pueden llevar a que viole los derechos de otras personas», dijo.
A su vez monseñor Santana Sequera precisó que en la reunión de los tres episcopados no se han tratado temas como la presencia de militares estadounidenses en bases colombianas.
El presidente del episcopado venezolano afirmó que el comunicado emitido apunta a expresar «unidad, amistad y hermandad entre las iglesias de nuestros países».
Por su parte, monseñor Arregui Yarza recordó que Venezuela, Ecuador y Colombia son países hermanos, por lo que «siempre es un poco desgarrador las peleas en el seno de una familia».
Respecto a la utilización de términos fuertes en las declaraciones públicas por parte de los mandatarios, monseñor Arregui Yarza dijo que «la crudeza y dureza del lenguaje» empleado «no es una fórmula política aceptable (…). El lenguaje puede defender una posición, pero no ser insultante», agregó el prelado ecuatoriano.
Al respecto, monseñor Santana Sequera afirmó que «el lenguaje de altura no debilita ninguna posición».
Comunicado de los representantes de los tres episcopados: Llamamiento a la unidad de obispos de Colombia, Ecuador y Venezuela